El Consejo Federal de la Federación Italiana de Fútbol respaldó hoy por unanimidad la decisión del titular de la entidad, Giancarlo Abete, de parar los campeonatos tras la muerte de Gabriele Sandri, fanático de Lazio asesinado por un disparo policial el pasado domingo.

"No tenemos miedo de combatir a los canallas. Miramos de frente sin bajar la vista, que la bajen quienes sientan vergenza de sus actos, no nosotros", comentó el titular de la Liga Italiana, Antonio Matarrese, tras la reunión del Consejo Federal en la que el calcio cerró filas contra los violentos.

Matarrese confirmó que en la reunión todos aquellos que forman parte del fútbol respaldaron las decisiones adoptadas por Abete tras los trágicos acontecimientos del domingo y recordó que "el fútbol, en este momento, juega un rol fundamental en este país y en la sociedad en esta materia".

"Asumimos una responsabilidad y hoy la respaldamos", explicó Matarrese, quien señaló que los dirigentes apoyaron también la decisión de permitir que se disputase la fecha de la Serie A el pasado domingo después del asesinato de Sandri y pese a los desmanes que estallaron al conocerse el hecho. Durante la reunión del Consejo Federal se debatieron también iniciativas relacionadas con la reanudación del torneo, el domingo 25 de noviembre, después de que este fin de semana se pare la pelota en las Series B y C, mientras que la A no se jugará por la disputa de las eliminatorias a la Eurocopa 2008.

"Queremos ganar el sábado para dedicarle el triunfo a la familia de Sandri", afirmó el arquero Gianluigi Buffon, en referencia al trascendental partido que Italia jugará con Escocia por la clasificación al torneo continental.

"No deben esperarse medidas clamorosas", anticipó en tanto Matarrese, mientras que Abete se refirió a la "necesidad de aislar a los violentos y de recuperar las reglas tácitas de respeto y convivencia civil".

Abete se mostró "muy satisfecho" por el apoyo no sólo a su gestión sino a una propuesta avanzada por el presidente de Atalanta, Ivan Ruggeri, quien suscribió un documento, firmado también por todos los integrantes del plantel, para tomar distancia de los fanáticos violentos.

"Creo que representa un ejemplo para todos, porque en todos los clubes de Italia se da esta situación con los hinchas más radicalizados", comentó por su parte el patrón de Inter, Massimo Moratti, al comentar la iniciativa de su colega Ruggeri.

Abete también aplaudió la decisión de la Liga de constituirse en parte civil para respaldar a los clubes y sociedades interesadas cuando las facciones violentas de los fanáticos provoquen daños al fútbol en general.

Las iniciativas para frenar la violencia en el calcio fueron consensuadas también con el Ministerio de Deportes y el del Interior y apuntan, además, a difundir los verdaderos valores del deporte y de la convivencia en las escuelas.

"Esta desgracia tiene que enseñarnos a todos y no debería ser otra muerte inútil", recordó Matarrese, quien propuso también que los sectores de los estadios cerrados a los fanáticos violentos por parte del organismo a cargo de la seguridad se abran a las familias y a los niños.

"Le pido al Observatorio que asigne esos espacios vacíos en las tribunas a las familias, a las parroquias y a los voluntarios", comentó el dirigente en diálogo con ANSA.

Abete, en tanto, recordó que "parar el fútbol por un año, por dos o por tres no sirve de nada. Debemos pelear día a día para ganar esta batalla contra los violentos. Este es un tema cuya solución llegará a largo plazo si actuamos como se debe".

Sergio Campana, titular de la Asociación Italiana de Futbolistas (AIC), se refirió también a la necesidad de que los jugadores adopten una posición clara contra la violencia y dijo que espera que "todos imiten lo hecho por sus colegas de Atalanta".