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24 de abril de 2024
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Después de cinco meses ganó Quilmes en el Clausura
16 de abril de 2011
En el inicio de la décima fecha, “El Cervecero” le ganó 3 a 1 a “La Lepra”, con dos goles de Romeo y uno de Cauteruccio (Sperdutti había empatado).

El local, que consiguió su primer triunfo en el campeonato, sigue en descenso directo, pero abandonó el último lugar de la tabla de posiciones, que ahora le pertenece al equipo rosarino

Ahora, el equipo rosarino, sin Sensini, sin Bielsa y con interrogantes varios, quedó en la última posición. Quilmes lo ve desde un escalón arriba, luego de cortar una serie negativa de seis derrotas y tres empates.

Con la sapiencia de Caruso Lombardi, un entrenador de fuste, y con dos goles de Bernie Romeo, el gran artillero, el que pelea contra su físico y el paso del tiempo.

Fue un gran segundo tiempo de Quilmes, que está mal, muy mal. Casi condenado al descenso. Pero que con partidos como el de anoche, puede creer que todo es posible.

Hubo incidentes entre los hinchas rosarinos. Que hasta arrojaron algunas piedras hacia la platea de Quilmes. Un proyectil hirió a un periodista. Lamentable.

Empezó mejor Quilmes. Pujante, preciso, veloz. Tal vez, de lo mejor del torneo, con varias situaciones de gol y avances que derivaron en tiros de esquina.

La mejor presión del equipo cervecero tuvo su recompensa: un centro de Diego Torres encontró el cabezazo goleador de Bernie Romeo. De manual: de pique al piso.

Sin embargo, la volátil marcha de Quilmes hizo todo lo demás. Sin ser demasiado mejor, Newell's tomó al posta que le cedió el nerviosismo y la tensión local. Y con poco, empató con un gran zurdazo de Sperdutti, tras un pase de Bieler.

Sintió el impacto Quilmes. El equipo rosarino, con Bernardi como estandarte, rearmó sus piezas y controló mejor el asunto.

Sin embargo, nunca Newell's dio un salto de calidad, siempre estuvo bajo la sombra de Quilmes.

Por eso, durante la segunda mitad, el equipo del Sur insistió otra vez. Mantuvo las ganas del principio. Y con un remate cruzado de Cauteruccio, se puso en ventaja otra vez. Lo merecía, frente a otra versión errática de Newell's.

Más tarde, Romeo resolvió el triunfo y provocó la explosión de Quilmes. Que ganó y, sobre todo, gustó...

Marcó Romeo, luego de casi cinco meses. Bernardo Romeo es un enamorado del gol. Construyó su carrera a fuerza de festejos, aunque en los últimos tiempos algunas lesiones lo marginaron de la acción.

Con un gran cabezazo y un zurdazo, anotó dos veces. Su último gol había sido el 27 de noviembre último, en el 2-1 ante All Boys.