Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
29 de marzo de 2024
Seguinos en
Por Adrián Taccone
Copa Davis: ese inalcanzable objeto de deseo argentino
Argentina perdió por cuarta vez en su historia la final de la Copa Davis y la Ensaladera de Plata parece resistirse a calzarse los colores albicelestes. Nuevamente España fue el verdugo, con un Rafa Nadal increíble
4 de diciembre de 2011
No es momento de críticas despiadadas, porque simplemente no hay razones para hacerlas, sino más bien para pensar que el camino parece ser el correcto, más allá de que duela, de bronca y deje un sabor amargo en la boca.

Si se repasa este fin de semana en Sevilla se llegará a la conclusión que Argentina estuvo sin lugar a dudas a la altura de las circunstancias, que los jugadores entregaron todo, pero claro, enfrente estaba España con el tremendo Rafael Nadal y sobre polvo de ladrillo una superficie que él domina como nadie lo ha hecho en la historia del tenis.

Seguramente el punto de quiebre era el segundo single del viernes, cuando Juan Martín Del Potro perdió ante David Ferrer, pero también hay qiue decir que el tandilense dejó todo y chocó contra el número 5 del mundo, algo que no es poca cosa.

El dobles trajo esa luz de esperanza que todos los argentinos deseábamos, con un David Nalbandian que dejó de lado las cuestiones personales y pensó en el equipo, para ubicarse en la posición más beneficiosa en torno al objetivo deseado.

Distintas realidades, porque mientras Argentina sufrió su cuarta derrota en una final de Copa Davis -tres en la última década- España alzó por quinta ocasión la Ensaladera de Plata, todas ganadas desde el 2000, casi en coincidencia con el dominio de Rafa Nadal en el mundo del tenis.

Las cábalas, las ocasiones, las disputas, los enfrentamientos, las condiciones, y todos los argumentos que puedan esgrimirse para tratar de dilucidar el porqué el trofeo más importante por equipos que entrega el tenis no puede llevar el nombre de Argentina, sigue siendo un misterio.

Ya casi como que ganar la Copa Davis es una causa nacional, en la que gente afín a este deporte y aquellos que no sienten la misma pasión, ponen su granito de arena para conseguir que ese objetivo pueda cumplirse.

El tiempo del análisis y el balance está en marcha, tal vez habrá que replantear algunas cuestiones, tal vez mantener otras, pero lo cierto es que aún debemos esperar para poder gritar campeón, mientras apladimos a los nuevos reyes del tenis.