El consultor Jorge DellOro señaló que la discusión entre Kirchner y Duhalde dejará a uno de los dos fuera de la cancha.
El consultor y analista político
Jorge DellOro advirtió que el justicialismo corre peligro de disgregarse y evaluó que la disputa entre el presidente Néstor Kirchner y el ex mandatario Eduardo Duhalde es una pulseada de caudillos para dirimir quién maneja el partido.
DellOro evaluó que el PJ está atravesando un proceso de cambio profundo, pero lamentó que se mantenga la impronta de evitar las elecciones partidarias.
La falta de ejercicio democrático interno en los partidos políticos lleva a estas confrontaciones, a pulseadas de caudillos en las que el afiliado es ajeno y no puede expresarse, puntualizó.
En una entrevista al programa
Asteriscos.Tv, que se emite por canal P+E, DellOro remarcó que en la pulseada entre Kirchner y Duhalde en principio, pierde el país, y estimó que sólo con el resultado de las elecciones legislativas de octubre estará claro quién va a llevarse los laureles; quién ganó y quien se queda afuera de la cancha.
De todos modos, remarcó que la mayor preocupación es la disgregación del partido ya que se produjo un vaciamiento ideológico y una carencia en la formación de jóvenes, que lleva a dirimir quién maneja el partido a través de enfrentamientos no democráticos.
El justicialismo está fracturado, pero siempre emerge dentro un fuerte líder que arrastra, que aglutina y lleva adelante el partido. Hoy, hay dos que pujan por eso, y en octubre se sabrá quien de los dos queda en la cancha, evaluó.
También trazó un perfil diferenciado entre Cristina Fernández de Kirchner quien aparece con una ventaja significativa en las encuestas, y se la ve como un ensayo de lo que se está dejando, que fue la transversalidad y Chiche Duhalde, con una formación más justicialista tradicional.
DellOro estimó finalmente que Kirchner está buscando nuevos aliados, dentro y fuera del justicialismo y definió que más allá del resultado electoral de octubre, el presidente eligió un camino de querer construir con otras fuerzas.