El candidato a jefe de Gobierno porteño por el Partido Autonomista, Ricardo López Murphy, cargó con dureza contra el gobierno nacional al sostener que la ciudad de Buenos Aires es "discriminada" y sufre injustamente una escasa devolución de lo que aporta al Estado nacional.

El ex ministro de Economía explicó que la ciudad aporta el 25 por ciento de lo que recauda el Fisco en todo el país y recibe a cambio sólo el 1 por ciento por coopartipación.

En declaraciones a Asteriscos TV, el economista dijo que esto "nadie lo dice porque si todo el mundo lo supiera no los votaría".

En su crítica, dirigió sus dardos no sólo al Gobierno nacional sino también a la gestión de Mauricio Macri, por no saber defender los derechos de los porteños.

"Macri no sabe plantear los temas de la ciudad, no sabe defendernos y reclamar lo que nos corresponde", se quejó.

En lo puntual sobre el distrito, López Murphy reconoció que debió armar una campaña "a largo plazo y muy artesanal", ante la falta de recursos que "parecen sobrarles" a los oficialismos nacional y porteño.

Los ejes de sus propuestas giran sobre un proyecto de ciudad digital donde el acceso a las nuevas tecnologías sean "fundamental", la necesidad de ordenar el sistema de salud de la ciudad, una mirada mas fuerte hacía el medio ambiente y proyectar un plan "serio" de seguridad.

En ese aspecto, también criticó al gobierno nacional: "Desde 2003 nunca pudieron tomar en serio la problemática de la inseguridad, básicamente porque no saben como hacerlo. Tienen reacciones de parches que no sirven y además se nota que la ministra (Nilda) Garré tiene alergia a la Policía Federal, y así no funciona".

López Murphy criticó con dureza las "mentiras del Indec" y señaló que si el gobierno fuera "vivo" no "mentiría con la inflación, y hasta quizás sería menor a la que hoy los argentinos sufren".

"Hay un problema de confianza y de sinceramiento en la economía, está claro. Si tenemos un gasto que crece al 35 por ciento, tenemos una emisión que crece al 44 por ciento, salarios que aumentan un 28 pro ciento y una inflación de 11 por ciento, deberíamos darle ya el Premio Nobel a la presidenta. Es un mundo irreal", indicó.