El primer día de actividad oficial de Cristina Kirchner como presidenta estará dominado por los encuentros bilaterales con líderes del mundo que viajaron a Buenos Aires para su asunción.

En la agenda se destacan las reuniones con el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, el príncipe Felipe de Asturias , el presidente de Colombia, Alvaro Uribe y la madre de Ingrid Betancourt, la ex candidata a presidenta de ese país que fue secuestrada por las FARC hace cinco años.

La frenética ronda de audiencias comenzará con el representante de la familia real española que ayer estuvo en la ceremonia de traspaso del mando en el Congreso. El encuentro se producirá luego de que el rey Juan Carlos I impusiera una pausa a la mediación de la corona española en el conflicto por Botnia y luego de que la Presidenta dedicara uno de los párrafos más duros de su discurso a su par uruguayo Tabaré Vázquez, también presente en el Parlamento.

Luego llegará el turno del mandatario colombiano, con quien se descuenta que Cristina Kirchner discutirá la situación de Betancourt. Ayer, en el Congreso, la ex primera dama hizo un llamado especial a Uribe para que actúe según el derecho internacional humanitario y "antes de que sea demasiado tarde".

También se comprometió con la madre de Betancourt, Yolanda Pulecio a quien también verá hoy, a realizar "todos los esfuerzos" para colaborar con el proceso que permita lograr su liberación.

Más tarde, volverá a verse cara a cara con Hugo Chávez, que viajó el domingo a Buenos Aires y fue uno de los presidentes invitados al último acto de Néstor Kirchner como presidente: la firma del acta fundacional del Banco del Sur.

No se descarta que con el venezolano la flamante presidenta aborde el caso Betancourt, días después de que Uribe decidiera retirar a Chávez de su lugar de mediador con las FARC. También es probable que hablen de la incorporación del país caribeño al Mercosur, que Cristina Kirchner pidió ayer acelerar, y que avancen sobre temas de la agenda bilateral como la cuestión energética.

Detrás de Chávez llegarán Pulecio y Piedad Córdoba, senadora colombiana que hizo propia la causa de Betancourt.

Por la tarde llegará uno de los platos fuertes de la jornada: el encuentro con Strauss-Kahn. El pago de la deuda de 6200 millones de dólares que la Argentina mantiene con el Club de París, y la participación que la Argentina le dará al FMI en el proceso, forma parte de la agenda de la audiencia. Antes, el jefe del Fondo verá al flamante ministro de Economía, Martín Lousteau.