La imponente aeronave comercial Airbus 380 sufrió hoy su primer contratiempo en Singapur, desde su entrada en servicio el 25 de octubre pasado. El accidente ocurrió cuando era remolcado por una grúa.

La compañía responsable, Singapore Airlines (SIA), aseguró en un comunicado que ningún pasajero ha sufrido ningún daño y todos los pasajeros del avión, que se dirigía a Sydney, fueron trasladados a un Boeing 747 para volar a la ciudad australiana.

La aerolínea añadió que el A-380 se salió del asfalto y fue a parar al césped cuando todavía no estaba utilizando su propia fuerza, sino que era remolcado hacia la pista de despegue por una grúa, que sufrió un fallo en su sistema hidráulico.

El Airbus A-380 pasará un examen técnico antes de entrar de nuevo en servicio.

Tras dos años de retraso por problemas en el cableado del avión, el A-380 fue entregado a Singapure Airlines el pasado 15 de octubre en París, y voló hacia la ciudad australiana dos días más tarde.


En el vuelo inaugural, los pasajeros de hasta 35 nacionalidades pagaron entre 560 dólares por un asiento en clase turista y 100.380 dólares por una "suite" sólo por la ida a Sydney.

Aunque su capacidad es de 800 asientos de la clase turista, SIA ha adaptado el avión para 399 plazas de esa categoría, siendo el resto 60 de clase "business" y doce compartimentos o "suites", todas ellas acondicionadas con televisión de pantalla plana, camas cubiertas con sábanas diseñadas por Givenchy y mesas escritorio.