Sin poder disimular la crisis institucional que vive, Racing Club trasladó su hecatombe al campo de juego, y a pesar de mostrar algunas luces de fútbol, el equipo responde al clima que vive la entidad, y cayó en Avellaneda ante el ordenado y oportunista Newell's Old Boys.

El equipo de Carlos Ischia dominó, jugó pasajes interesantes , tuvo oportunidades de gol, pero como todo le sale al revés, la Academia padeció una nueva derrota --la sexta del Torneo Inicial--, tras un enorme jugada individual de Maxi Rodríguez, quien a los 40 minutos del segundo tiempo, sentenció otra noche triste para el equipo de Avellaneda.

De nada sirve relatar que Racing pegó tres tiros en los postes, que por momentos bombardeó el arco de los rosarinos, porque esas buenas intenciones se opacan cuando se ve al equipo último en la tabla, con solo dos puntos sobre 24 jugados.

En este contexto, la Lepra, con su ambiciones, orden y paciencia, sacaron provecho del mal momento del local y ganaron un partido clave que los ubica, solitarios en el primer lugar de la tabla de posiciones , lugar que al final de esta fecha no abandonaran

La síntesis de esta profunda crisis fue el final de partido y los insultos de la hinchada repartidos en dos de los máximos responsables de esta crisis: el presidente Cogorno y su vice Molina, peleados por el poder, en una actitud tan egoísta donde ninguno gana y si pierde uno solo: Racing Club