En un episodio que hiela la sangre, un avión de Malaysia Airlines, el vuelo MH17, que viajaba desde Amsterdam a Kuala Lumpur con 295 personas a bordo -incluidos 80 chicos- fue derribado hoy por un misil en el este de Ucrania, cerca de la frontera con Rusia, en la convulsionada región de Donetsk.

El ministro del Interior de Ucrania, Anton Gerachtenko, aseguró que el avión fue derribado y que los 280 pasajeros a bordo y los aproximadamente 15 miembros de la tripulación murieron.

Geratchenko dijo que el avión fue derribado con un misil disparado desde un sistema de defensa antiaéreo desarrollado por militares soviéticos en la década del 80.

El sistema fue desarrollado para alcanzar objetivos que se encuentren hasta a 25.000 metros de altura.

Las fuerzas prorrusas en cambio aseguraron que el avión fue derribado por las tropas leales a Kiev. El gobernador autoproclamado de la "República Popular de Donetsk", Alexander Borodai, aseguró que se trata de una "provocación" de las Fuerzas Aéreas ucranianas, mientras negó que sus propias filas cuenten con los equipos necesarios para derribar una nave que se encuentra a 10.000 metros de altura.

El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, se apresuró a negar que sus fuerzas armadas hayan derribado el avión de Malaysia.

Una de las teorías que se manejan hasta ahora con más fuerza es que los separatistas atacaron por error el avión de Malaysia Airlines cuando intentaban golpear un avión de transporte ucraniano señalado por fuerzas antiaéreas rusas, dijo una fuente del ministerio de Defensa en Kiev.

En el momento del hecho, estaba en vuelo un Iliushin 76, con víveres para soldados de Kiev.

El MH17 es un Boeing 777 de la misma compañía del vuelo MH370, desaparecido en el océano Índico el 8 de marzo pasado y del cuál nunca se supo nada.

Una fuente de la aviación rusa, citada por la agencia de noticias Interfax, dijo que el avión fue abatido a 10.000 metros de altura en el este de Ucrania.

La región en la cual cayó el avión es la de Shiaktiorsk, 40 kilómetros al este de Donetsk, una zona de combates en el este del país entre los separatistas prorrusos y fuerzas militares ucranianas.

El avión fue abatido poco después de que el gobierno ucraniano acusara a Rusia de haber derribado horas antes un caza del tipo Su-25 que cumplía una misión en territorio ucraniano.

Kiev ya había acusado a Rusia de haber derribado el lunes un avión de transporte militar An-26. Cuatro de los ocho miembros de la tripulación de este aparato fueron rescatados, dos fueron hechos prisioneros y otros dos murieron, precisó hoy la misma fuente. Esto lleva a tres aviones derribados en la misma zona en cuatro días.

El antecedente más cercano de una tragedia aérea de la magnitud de la de hoy remite directamente al misterio del avión Malaysia que cayó en aguas del océano Indico el 8 de marzo pasado.

Esa aeronave, con 239 personas a bordo que volaba desde Kuala Lumpur a Beijing, desapareció misteriosamente de los radares a 40 minutos de haber despegado. Hasta hoy, y pese a los arduos trabajos de búsqueda con todo tipo de tecnología, no se hallaron sus restos y se desconoce qué fue lo que pasó.

Hoy la compañía Malaysia confirmó que había perdido comuniación con su vuelo cuando este sobrevolaba suelo ucraniano a 50 kilómetros de la frontera entre Ucrania y Rusia. “La última posición conocida era sobre Ucrania”, dijo la empresa aérea.

Boeing, fabricante del avión, aseguró estar investigando lo ocurrido. “Tenemos noticia de los informes del MH17”, escribió Boeing hoy en Twitter. “Estamos recopilando informaciones”.