No venía siendo un buen año para Juan Mónaco. Los resultados no lo habían acompañado, apenas había podido acceder dos veces a cuartos de final (en San Pablo y Dusseldorf) y había salido del top 100.

Sin embargo en estos días todo eso parece parte de un tiempo lejano. El tandilense extendió su buena semana, derrotó por 6-3 y 7-6 (7-4) a Robin Haase y accedió a la final del ATP 250 de Gstaad, que se juega sobre polvo de ladrillo y reparte 426.605 euros en premios.

No fue fácil la tarea para Pico, que en ambos sets debió remar desde atrás, ya que el holandés, 51° del ranking mundial y séptimo cabeza de serie del certamen, le quebró el servicio de entrada. Sin embargo Mónaco, que había llegado hasta esta instancia tras superar al brasileño Thomaz Bellucci, no se dio por vencido, evidenció su garra intacta y ráfagas de buen tenis, consiguió recuperarse y se quedó con el partido tras una hora y 44 minutos de juego.

El rival del tandilense en la definición del domingo será el español Pablo Andújar, quien le ganó a su compatriota y cuarto favorito del torneo, Fernando Verdasco, por 6-3, 6-7 (2) y 6-1. Será la 19ª final en la carrera de Mónaco (la última fue el año pasado, en Kitzbuhel), de las cuales ganó ocho. Su última coronación también fue en 2013, en Düsseldorf.