El Olympique de Marsella que dirige Marcelo Bielsa sigue imparable y líder en el campeonato francés y este domingo sumó su octava victoria consecutiva (2-0) frente a Toulouse (10) en la décima jornada y por el momento sacó 7 puntos de ventaja, hasta que Burdeos, ahora tercero, juegue ante Caen.

Los hombres del Loco se impusieron gracias a los tantos del camerunés Nicolas N'Koulou (minuto 20) y el infalible Andre-Pierre Gignac, que lleva convertidos 10 goles en igual cantidad de jornadas.

Tras este triunfo y la victoria (3-0) del París SG el viernes ante el Lens (20), el Marsella suma 25 puntos, por los 18 de los parisinos y los 17 del Burdeos, que recibe desde las 12 de la Argentina al débil Caen (19).

La racha triunfal del Marsella iguala a las que consiguió el club entre enero y abril de 1937 y entre septiembre y noviembre de 1998.

Pero, posiblemente lo más importante sean los siete puntos de ventaja que tiene sobre el vigente campeón, el PSG, con quien se medirá en el Parque de los Príncipes dentro de tres fechas.

Como es habitual, el "loco" fue el personaje del partido con su caminatas, gritos y actos que lo hacen ser el centro en cada momento, pero esta vez estalló en "ira" por un hecho inusual dentro de la cancha: se quemó con un café.

Esta vez no fue una 'locura' propia, sino producto de un olvido importante. Mientras el DT daba indicaciones a sus jugadores, uno de sus asistentes le dejó en su habitual heladerita un vaso de café, la nueva cábala del rosarino. Sin embargo, Bielsa nunca se dio cuenta, se sentó encima y explotó de bronca por haberse quemado