El presidente electo Mauricio Macri mantuvo una reunión con el canciller de España, José Manuel García Margallo. Tras una reunión en la sede del gobierno porteño de Parque Patricios, el jefe de la diplomacia española admitió que su visita por estos días a la Argentina están cargados de un "simbolismo especial".

"Queremos demostrar que queremos volver a tener relaciones con la Argentina al nivel de lo que ha sido nuestra relación histórica y nuestros lazos culturales y humanos", señaló.

El enviado español pidió un voto de confianza a los empresarios españoles.

Los vínculos con el país europeo, se enfriaron tras la estatización de la petrolera YPF, y la consecuente salida de la española Repsol, en 2012.

García Margallo compartió una conferencia de prensa con el futuro jefe de Gabinete Marcos Peña. La modalidad fue toda una señal de la importancia que tendrá este joven funcionario en la futura gestión: Macri no habló frente a las cámaras tras la reunión.

Dijo esperar que la Argentina pueda potenciar al Instituto Cervantes "para que sea mucho más latinoamericano que español" y también pidió "compartir instalaciones diplomáticas", como embajadas y consulados, en el mundo.

Antes de la reunión, el diplomático español consideró que el presidente electo "va a tener unas relaciones con España realmente espectaculares", al tiempo que destacó que "las relaciones entre Macri y el presidente Mariano Rajoy son entrañables".

"Tenemos lazos humanos y culturales muy importantes, y los tendremos más con el nuevo gobierno. España va a apoyar a la Argentina en todo lo que esté a nuestra mano. Las comunicaciones van a ser abiertas, como es normal con los países amigos", enfatizó García Margallo, en el contacto con la prensa tras el encuentro con Macri.

El ministro español también reveló que el rey Juan Carlos I representará a su país durante la asunción del presidente electo el 10 de diciembre y consideró que es "el mejor gesto" que pueden hacer en su país "para honrar la investidura de un Presidente".