El gobierno argentino decidió reforzó los controles de su espacio aéreo, las vías fluviales y los puestos de fronteras de todo el país al declarar la emergencia en seguridad por un año.

La medida, consensuada en diciembre pasado con los ministros del área de todas las provincias, persigue "revertir la situación de peligro colectivo creada por el delito complejo, el crimen organizado y el narcotráfico".

"El gobierno deja a cargo de los Ministerios de Seguridad, de Defensa y de Transporte la tarea de reforzar los mecanismos de seguridad en todos los medios de transporte aéreos", informó el comunicado del gobierno.

También impulsa la compra de "material indispensable para incrementar la vigilancia de la frontera fluvial, los puertos y los espacios marítimos de jurisdicción nacional".

La lucha contra el delito en general y el narcotráfico en particular fue una de las promesas de campaña del presidente Mauricio Macri, un liberal de derecha que asumió la presidencia el 10 de diciembre pasado.

El decreto establece que la emergencia podrá ser prorrogada por un lapso equivalente.

También "se adopta en forma inmediata las medidas para dotar de dispositivos materiales, técnicos y tecnológicos a la Zona de Frontera, que incluye una radarización para el eficiente control fronterizo", según se indicó.

A su vez indica que las Fuerzas Armadas serán las encargadas de "identificar, advertir, intimidar y hacer uso de la fuerza (como último recurso) a vectores incursores en el espacio aéreo argentino".

"Serán declaradas hostiles aquellas naves, cuando tengan entidad suficiente para perturbar, poner en riesgo o causar un daño en el territorio nacional", indicó el decreto.