Boca finalmente echó al vasco Rodolfo Arruabarrena tras la derrota ante Racing.

La resolución llegó tras la reunión que el entrenador mantuvo con el presidente de Boca, Daniel Angelici, un día después de la derrota con Racing por 1 a 0.

El Vasco quería continuar, pero el presidente le comunicó que su ciclo estaba cumplido. Angelici le pidió a Arruabarrena hablar tras el entrenamiento.

Ambos se debían se debían la reunión desde la semana pasada, en la cual los viajes del dirigente a Suiza y Paraguay hicieron imposible el encuentro.

Esta vez, se juntaron en Casa Amarilla. Allí, el Vasco expresó su deseo de continuar pero se encontró con una decisión que ya estaba tomada.

Angelici le dijo al Vasco que no podía volver a sostenerlo en el cargo frente al disgusto del resto de la dirigencia, tal como ya lo había hecho luego de la derrota ante San Lorenzo por la Supercopa Argentina.

El entrenador le manifestó que creía que los partidos que vienen (ante Racing por la Libertadores y River por el torneo local) eran ideales para revertir la situación, el presidente se mantuvo firme.

Angelici y Arruabarrena ya se habían reunido tras la dura derrota por 4 a 0 sufrida por Boca en la final de la Supercopa Argentina.

El DT le manifestó que contaba con fuerzas para continuar. Y pese a la posterior derrota ante Atlético Tucumán, los triunfos que siguieron ante San Martín de San Juan y Newell's le habían dado algo de aire.

A diferencia de otras situaciones en las que la continuidad del DT estaba en juego, la decisión de echar a Arruabarrena fue tomada sin consultar a los referentes del plantel.

Por ahora Boca será dirigido por Rolando Schiavi, DT de la Reserva.