En otra ramificación de los escándalos de corrupción de la etapa K, ahora se sospecha la falsificación de una serie de firmas de Néstor Kirchner en los libros societarios de la empresa Hotesur.

Si la Justicia confirma los peritajes, se complicará la situación procesal de la ex presidenta Cristina Fernández y sus hijos, Florencia y Máximo.

El juez Julián Ercolini ordenó peritajes en agosto último, pero según el diario La Nación, la diputada Margarita Stolbizer puso la lupa sobre la autenticidad de las firmas y los libros societarios de Hotesur -controlante del hotel Alto Calafate- en 2015, en base a por lo menos dos situaciones que llamaron su atención. El primer episodio que despertó la creencia de que las firmas del ex presidente podrían haber sido adulteradas se remonta al 13 de julio del 2015, cuando el juez Claudio Bonadio ordenó allanamientos en Río Gallegos y colaboradores de la presidenta de Hotesur y sobrina de Néstor pidieron 48 horas para entregar los libros societarios comerciales.

El segundo episodio ocurrió entre el 3 y el 11 de noviembre del mismo año, cuando la causa Hotesur estaba en manos del juez federal Daniel Rafecas, luego de que Bonadio fuera apartado.

La defensa de Romina Mercado -presidenta de Hotesur y sobrina de Néstor- pidió copias de los libros y el juez autorizó el movimiento, cuya custodia estaba a cargo de Prefectura, sin que se dejara constancia de nada llamativo en el momento en que se retiraron los documentos. Sin embargo, cuando fueron devueltos Prefectura indicó que había "enmiendas y tachaduras".

Ante el pedido de Stolbizer, que consideró que de haber una adulteración podría entorpecer la investigación por presunto lavado en marcha contra los Kirchner, el fiscal Carlos Stornelli solicitó un peritaje caligráfico. Pero en febrero de este año, Rafecas rechazó las acusaciones y luego se declaró incompetente.

En agosto, Ercolini -tercer juez a cargo de la investigación- accedió al pedido de la diputada y pidió un peritaje caligráfico y scopométrico sobre los libros de Hotesur y las firmas de la familia Kirchner. A pedido de los nuevos fiscales a cargo de la pesquisa, Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques, el juez ordenó investigar "tachaduras, enmiendas, sobreescrituras", entre otras anomalías en la documentación.

Ercolini además pidió investigar si las firmas de 13 personas que integraron el directorio de Hotesur, entre otras las de Néstor, Máximo, Florencia, Mercado, la hermana de la ex presidenta, Gisela Fernández, y la esposa y el socio de Máximo, María García y Osvaldo "Bochi" Sanfelice, "resultan ser de puño y letra de los nombrados o si resultan apócrifas".

Tras los episodios sospechosos, en diciembre del año pasado, la familia Kirchner intentó registrar en la IGJ cambios societarios que habrían ocurrido en marzo, nueve meses atrás.

Sin embargo, ya con el nuevo Gobierno electo, la entidad frenó el trámite y señaló la existencia de diferencias en "la cantidad de acciones depositadas", "dos montos" de "capital social inscripto", "fechas de registros distintos", y que faltaban "datos de inscripción del directorio que convocó a la asamblea" y que la solicitud presentada incumplía con una resolución del organismo. El dictamen de los peritos -siempre según La Nación- sería presentado ante la Justicia de manera "inminente" y concluiría en que las firmas de Néstor Kirchner en los libros societarios de Hotesur son falsas.