La policía reprimió hoy con balas de goma y gases lacrimógenos a trabajadores de ARG-Clarín reunidos en reclamo por sus puestos de trabajo en un taller grágico de Nueva Pompeya

"Acá, los trabajadores de Arte Gráfica Rioplatense estamos sufriendo una represión, a pesar de que hemos sufrido despidos absolutamente ilegales; la empresa nunca presentó nada en el ministerio de Trabajo, no hay convocatoria de acreedores, no hay quiebra, no hay un carajo, nos están cagando a balazos de goma, nos están tirando gases, nos están reprimiendo, han reprimido a las familias de nuestros compañeros que están acá en la puerta", dijo desde la fábrica el secretario general de la junta interna de AGR, Pablo Viñas.

"Llamamos a todas las organizaciones a rodear de solidaridad nuestro conflicto porque lo que quieren es reventarnos para aplicar el ajuste en todo el país", cerró.

Los obreros de AGR-Clarín se encuentran ocupando la planta ubicada en el barrio de Nueva Pompeya en defensa de sus puestos de trabajo, luego de que la patronal anunciara el cierre de la fábrica gráfica, este lunes.

El cierre de una de las plantas impresoras del Grupo Clarín y el despido de sus 385 trabajadores reabrió las grietas que resquebrajan el frente sindical: reavivó las quejas de los gremios más combativos –particularmente, de los reunidos en la Corriente Federal, el grupo liderado por el bancario Sergio Palazzo- por la pasividad de la conducción de la CGT y los recamos de una postura más activa frente al gobierno del presidente Mauricio Macri. El triunvirato que conduce la central obrera “confió en un diálogo (con la Casa Rosada) del que no sacó absolutamente nada”, criticó el secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense y advirtió: “Hoy, no hay lugar para otra cosa que definir un plan de acción”.

"Por ahora no hay ni siquiera una conciliación obligatoria que le ordene a la patronal que reabra las puertas de trabajo. Nos dicen que los excede; que Triaca renuncie si los excede", agregó Viñas.

Todo, mientras minutos antes finalizaba una reunión en el ministerio de Trabajo entre la Comisión Directiva del sindicato gráfico y delegados de AGR-Clarín con las autoridades de esa cartera.

Militantes del Partido Obrero presentes en la fábrica denunciaron que allí fue cuando empezó a avanzar el operativo policial que terminó con balazos de goma, gases lacrimógenos y agua caliente contra quienes estaban aguardando en la calle y la vereda.

En la reunión en el ministerio, luego de cuatro horas de audiencia, "la patronal de AGR-Clarín ratificó el cierre de la gráfica con los mismos argumentos que viene sosteniendo. Ante las autoridades que recibieron a la Comisión Directiva del sindicato gráfico y delegados de AGR-Clarín, fueron refutados punto por punto cada una de las mentiras de la empresa y denunciamos el lock out. A pesar de ello, la Directora Nacional de Relaciones Laborales se negó a dictar la conciliación y no dio ninguna respuesta. Se excusó de dar solución bajo el pretexto que el conflicto la excedía y derivó el expediente. Se trata de una completa complicidad con la patronal", denunciaron los trabajadores.