Tras el nuevo atentado terrorista en Nueva York, Donald Trump llamó a Mauricio Macri para expresarle sus condolencias por la muerte de cinco argentinos.

La comunicación se produjo luego de una serie de señales por parte del gobierno norteamericano ante la trágica e inesperada muerte de un grupo de rosarinos que estaban festejando los 30 años de su egreso del Politécnico de la ciudad.

En el mismo sentido se había expresado el agregado de negocios en la Argentina, Thomas Cooney. El secretario de Estado Rex Tillerson llamó al canciller Jorge Faurie. Y luego se produjo la llamada de Trump. La embajada de Estados Unidos en Buenos Aires tiene su bandera a media asta en señal de duelo.

El lunes y martes próximos, Macri estará en Nueva York en un viaje de inversiones y negocios junto a Faurie, el ministro de Finanzas, Luis Caputo, el secretario De Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, y posiblemente la primera dama Juliana Awada. El Gobierno argentino estaba analizando la posibilidad de que Macri haga un homenaje a los argentinos fallecidos cuando llegue a Nueva York el mismo lunes.

Aunque el estado no contempla la pena capital en su sistema penal, Sayfullo Habibullaevic Saipov sí podría recibir una condena a muerte en un juicio federal por terrorismo.

Horas antes, el presidente estadounidense había dicho que "definitivamente" pensaba evaluar su traslado a la cárcel de Guantánamo "El terrorista de Nueva York estaba contento cuando pidió que le colgaran una bandera de ISIS en su habitación", escribió el mandatario en Twitter, aludiendo a las primeras declaraciones de desde el hospital en el que se encuentra internado.

"Mató a 8 personas, hirió gravemente a 12. ¡Debería recibir la pena de muerte!", sostuvo Trump.