El cortocircuito entre la UIA y el Gobierno escaló.
Luego de que el ministro de Producción, Francisco Cabrera, respondiera con dureza las críticas que llegaron desde la Unión Industrial Argentina (UIA) y expresara que los empresarios tienen que "dejarse de llorar", el presidente de la central fabril, Miguel Acevedo, le salió al cruce con una ironía: "Me llamó la atención la declaración, quizás están un poco susceptibles".

Cabrera se había referido a las recientes declaraciones de empresarios de la UIA, quienes habían expresado su preocupación por el "crecimiento de las importaciones" y la "fuerte caída en el consumo".

El ministro había pedido "tener una agenda positiva y dejarse de llorar", palabras que no tardaron en llegar a oídos de los industriales.

"Me llamó la atención la declaración de 'Pancho' Cabrera, quizás están un poco susceptibles. Nosotros estamos de acuerdo con las medidas del Gobierno en general pero no podemos tener una mirada estadística. Lo que dijo no cae bien, pero lo vemos como un tropezón", dijo Acevedo.

Las rispideces comenzaron la semana pasada cuando la UIA, en lo que fue su primera reunión de Junta Directiva, manifestó abiertamente su descontento por por la fuerte caída del consumo, el crecimiento de las importaciones, los costos de la energía y la tasa de interés, entre otros puntos que provocaron la respuesta de la Casa Rosada. "Hay que poner paños fríos y tener discusiones más profesionales sino volvemos a la dicotomía empresa chica-empresa grande e industria vs. campo", sumó el referente de los industriales en esa línea.