Alrededor de 40 mil fumadores mueren cada año en la Argentina, lo que se puede traducir en una persona cada 15 minutos, según lo advirtió Reynaldo Smith, neumonólogo especialista en tabaquismo y Coordinador del Programa de Tratamiento y Control, RESPIRE, del Hospital Británico.

Al conmemorarse el 31 de mayo el Día Mundial Sin Tabaco la Organización Mundial de la Salud (OMS) recordó que la epidemia mundial del tabaquismo mata cada año a casi 6 millones de personas, de las cuales más de 600 mil son no fumadores y que mueren por respirar humo ajeno. Por lo que se advirtió que si no se actúa, esta afección matará a más de 8 millones de peSrsonas al año de aquí a 2030. Más del 80 % de esas muertes evitables se producirán entre las poblaciones de los países de ingresos bajos y medianos.

"De acuerdo a la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación en nuestro país mueren 40 mil fumadores cada año, es decir una persona cada 15 minutos, mientras un fumador termina de consumir su cigarrillo se produce una muerte más", advierte Smith.

El objetivo primordial del Día Mundial Sin Tabaco es contribuir a proteger a las generaciones presentes y futuras no solo de las devastadoras consecuencias del tabaco para la salud, sino también de los flagelos sociales, ambientales y económicos que se derivan del consumo de tabaco y de la exposición al humo que desprende.

Los objetivos específicos de la campaña de 2014 son: que los gobiernos aumenten los impuestos sobre el tabaco hasta niveles que reduzcan su consumo y que las personas y las organizaciones de la sociedad civil alienten a sus gobiernos a aumentar los impuestos sobre el tabaco hasta niveles que reduzcan su consumo.

En el marco de la conmemoración, el Servicio de Medicina Respiratoria del Hospital Británico, a través de su Programa de Tratamiento y Control del Tabaquismo RESPIRE, realizó actividades para concientizar sobre los riesgos del tabaquismo para la salud y presentó el programa PHITABA (Programa Hospitalario de Intervención en Tabaquismo) que se desarrollará a partir de este año en la institución y que consiste en el tratamiento del tabaquismo en pacientes internados por otras razones aprovechando así su estancia en el hospital para ayudarlos a abandonar el consumo de tabaco.

En 2011 el Hospital Británico se convirtió en el primer hospital de alta complejidad de la Ciudad de Buenos Aires en recibir el Certificado de Institución Libre de Humo de Tabaco por parte del Ministerio de Salud de la Nación.