Fue un día de semana, a la tarde, pero igual el estadio de Argentinos Juniors estaba repleto para ver el debut de un diamante en bruto que solo tenia 15 años y estaba a días de sus cumpleaños: se llamaba Diego Armando Maradona y hace 35 años con su estreno en primera cambiaba la historia del fútbol argentino.

El 20 de octubre de 1976, frente a Talleres de Córdoba y con el inicio del segundo tiempo, el enrulado volante saltó a la cancha con la camiseta número 16 y en su primera jugada bautizó su camino con un caño a su rival, como para dejar una marca por las hazañas a venir.

La "gran argentinidad" hace que a tres décadas y media de aquel hecho emblématico miles de hinchas digan sin ruborizarse que estuvieron ese día en las tribunas de madera del viejo estadio de La paternal, pero la verad que si todo los que se pronuncina de esa manera hubieran estado ni el estadio de River y Boca juntos alcanzaría para albergar tanta presencia.

"Vaya Diego, juegue como usted sabe. Y si puede tire un caño". Esa fue la indicación de Juan Carlos Montes, el técnico de Argentinos Juniors, para Diego Armando Maradona el miércoles 20 de octubre de 1976. .

La historia dirá que Talleres ganó 1-0 en La Paternal. Que Maradona entró en el entretiempo por Giacobetti.
Y también que Diego le hizo caso a su entrenador: en una de sus primeras intervenciones le tiró un caño a Juan Domingo Cabrera. "Fue tremendo. Pobre Cabrera, hasta el día que murió lo volvimos loco por ese caño", le cuenta Luis Ludueña, volante del equipo cordobés y autor del único gol, a Clarín.com

¿Cómo jugó Diego? Muy bien. Casi mete un gol de zurdo luego de hacer un sombrero y desplegó todo su talento.

"Ni siquiera el habilidoso e inteligente Maradona alcanzó para resolver el problema", dice la crónica de El Gráfico, de Héctor Onesime. "La gente ya lo conocía. Se hablaba mucho de Diego desde antes del debut. Nosotros habíamos visto en las inferiores. Era distinto. Y también cuando se entrenaba con nosotros. La única duda era saber si iba a poder desplegar todo su talento en la Primera División. Y vaya que lo hizo", dice Giacobetti.

Maradona cuenta en su biografía que "no me salían las palabras" cuando Montes me avisó que iba a ir al banco de suplentes. "Ese día toqué el cielo con las manos".

Las estadísitcas dice que seis meses después, ya con 16 debutaba en la selección mayor contra Hungría en la cancha de Boca, que tres años después ser´çia campeón mundial juvenl en 1979 y sus primera década de profesional, jugó dos mundiales, ganó uno y fue el mejor jugador del mundo, además de vestir la camiseta de Boca, Barcelona y el Napoli para ser el rey indiscutido del fútbol.

la vida, con su inevitable paso de etapas, dirá que una década despues de su debut ya era campeón del mundo y estrella mundial; que 20 años después, en 1996, quemaba sus últimos cartuchos en el fútbol y en 2006 era estrella de la TV argentina con su show televisivo en una renancimiento de su historia.

Hoy, dirige en un club árabe después de pasar como entrenador del seleccionado nacional sin pena ni gloria, pero como todo genio sigue reescribiendo su historia, como aquel míercoles de octubre donde dibujó sus primeras gambetas y donde..."yo lo ví..."