Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
27 de abril de 2024
Seguinos en
Las Leonas ganaron de la mano de Aymar
Vencieron 7-3 a Canadá tras empezar abajo. 'Lucha' anotó dos goles y sirvió a Sole García en otros dos para dar vuelta el resultado
21 de octubre de 2011
Las Leonas dieron otro paso rumbo a la final de los Panamericanos. Segunda presentación, segundo triunfo. Y aunque fue goleada, también hubo dudas.
Porque Canadá empezó sorpresivamente arriba en el marcador. A los 6, Culley abrió la cuenta para las norteamericanas, que en los papeles eran el rival más difícil del Grupo A (en el debut fue 11-0 a Trinidad y Tobago, y el domingo Las Leonas cerrarán ante Barbados), y lo ratificaron en la práctica.

Argentina tardó 10 minutos en igualar el marcador. Apenas un suspiro para el desarrollo del partido, pero fueron momentos de desconcierto. Hasta que Luciana Aymar se hizo dueña de la bocha y del partido. Lucha se adelantó unos metros en el campo de juego (había empezado como volante central, como ante Trinidad y Tobago), pero con el 0-1 se fue para adelante. Y cuando encara, no hay jugadora en el mundo que la pueda parar.

A los 16, apiló rivales, quedó cara a cara con la arquera, amagó y tocó para Sole García, que definió con el arco vacío y puso el 1-1. Alivio y a seguir. Un minuto después, Aymar con la bocha, se metió en el área y definió con un palazo a la red por encima de la arquera. Listo 2 a 1, las cosas en su lugar. Aymar puso el 3-1 con otro golazo. Y Sole García aumentó a los 25.

Pero el calor y –tal vez- la falta de motivación por tener resuelto un partido a muchos minutos del final hicieron que Las Leonas se relajaran y permitieran dos descuentos de Canadá (Haughn y Culley) para ir al descanso 4-3 en la chapa.

En el segundo tiempo Argentina se despegó del marcador rápidamente. A los 5, Noel Barrionuevo a la salida de un córner corto (su especialidad) puso el 5-3 y a los 18 repitió la escena para el 6-3. Más cerca del cierre, Carla Rebecchi selló el 7-3 y el triunfo argentino. Sólo quedó tiempo para un último susto, con Lucha Aymar en el piso agotada por el calor y la exigencia. "Le bajó un poquito la presión", explicó después el entrenador, Carlos Retegui.