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Israel y Jordania aceptaron la invitación del Papa
Las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos se interrumpieron a fines de abril y no se habían programado reuniones de alto nivel por el resto del año. Triunfo moral
25 de mayo de 2014
El papa Francisco obtuvo este domingo una importante victoria moral el domingo, al lograr que los presidentes israelí y palestino aceptaran visitarlo en el Vaticano el mes próximo para analizar los asediados intentos de paz.

Las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos se interrumpieron a fines de abril y no se habían programado reuniones de alto nivel por el resto del año.

El pontífice, que tomó el nombre de san Francisco de Asís, símbolo de la paz, llegó a Belén, la cuna del cristianismo, en un aval simbólico a las aspiraciones palestinas de un estado propio. Afirmó que el estancamiento en las gestiones de paz en la región era ``inaceptable'' y se detuvo brevemente a orar frente a la barrera de separación que los israelíes erigieron en torno de esta ciudad bíblica.

Al término de una misa al aire libre en la Plaza del Pesebre, en Belén, el papa invitó al presidente palestino Mahmud Abbas y el presidente israelí Shimon Peres a orar junto con él por la paz.

"Ofrezco mi hogar en el Vaticano como lugar para este encuentro de oración", les dijo. Las oficinas de los dos presidentes confirmaron rápidamente que aceptaban la invitación papal.

"Saludamos la invitación del papa Francisco al Vaticano. El presidente Peres ha apoyado y seguirá apoyando todas las vías conducentes a la paz", dijo la oficina de Peres en una declaración. El vocero de Abbas, Nabil Abu Rdeneh, afirmó que la cumbre tendrá lugar en algún momento en junio.

Peres, de 90 años, Premio Nobel de la paz, dejará su cargo pronto y la reunión tendría lugar poco antes de su alejamiento.

El dirigente histórico ha sido un promotor ferviente de los esfuerzos de paz para el Oriente Medio y el presidente israelí, cuyo cargo es mayormente ceremonial, arriesga a incomodar al primer ministro Benjamin Netanyahu con su aceptación.

Netanyahu ha manifestado indignación con los políticos que han tomado contacto con Abbas en momentos en que el líder palestino se reconcilió con el grupo miliciano Jamas, que Israel considera un grupo terrorista.