El kirchnerismo ve como el poder se le empieza a escapar de las manos en forma acelerada.

El juez federal en lo Contencioso Administrativo Esteban Furnari ordenó mantener en su cargo a uno de los dos auditores cuyo mandato dio por vencido el kirchnerismo al designar en la Auditoría General de la Nación (AGN) al ex secretario de Justicia Julián Alvarez y al ex jefe del Banco Nación Juan Ignacio Forlón.

La medida implica la inmediata caída de estas designaciones, según dijeron fuentes judiciales. El magistrado le dio preventivamente la razón al auditor en funciones en nombre de la Unión Cívica Radical (UCR), Horacio Pernasetti, quien deberá permanecer en funciones hasta el 14 de diciembre, como sostuvo la oposición en la última sesión de la Cámara de Diputados. Pernasetti recurrió a la Justicia para que no se modifique su situación y pueda ejercer el cargo hasta el 14 de diciembre.

Alvarez y Forlón habían sido designados por el bloque oficialista en lugar de Vilma Castillo y Oscar Lamberto al interpretar que sus mandatos vencían a principios de mes y no después de la asunción del nuevo gobierno, el 14 de diciembre, como sostenía la oposición.

A través de su resolución, Furnari suspendió "los efectos del requerimiento formulado por el titular" de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, al titular de la AGN, el también radical Leandro Despouy, y, en consecuencia, ordenar a ambas instituciones "que se abstengan de realizar cualquier acto que impida el pleno ejercicio de las funciones que le competen al Dr. Horacio Francisco Pernasetti en su carácter de Auditor General de la Nación".

La suspensión de esa carta es la que afecta la asunción de los camporistas.