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19 de marzo de 2024
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El paro se sintió con fuerza en la Ciudad y el conurbano
Con la adhesión del transporte público, mucha gente optó por ir al trabajo en auto, motos y hasta bicicletas. Dura pulseada entre el Gobierno nacional y la oposición en el cuarto paro contra Macri
25 de septiembre de 2018
La Confederación General del Trabajo, con fuerte respaldo del kirchnerismo, la izquierda y las "organizaciones sociales", concretó su cuarto paro general contra el gobierno de Mauricio Macri.

A la protesta convocada en rechazo a las políticas de la Casa Rosada adhirieron todos los gremios de transporte por lo que no habrá ni colectivos, ni trenes, ni subtes, ni aviones. La apuesta es que el centro porteño muestre un aspecto desolado.

A la medida de la CGT se le agregan las ya iniciadas desde el mediodía del lunes por las dos CTA y los movimientos sociales, que pidieron un cambio de rumbo o que "caiga el gobierno".

El reclamo es por reapertura de paritarias, la suspensión de despidos y la declaración de la emergencia alimentaria, entre otras acciones para contrarrestar la crisis económica disparada en los últimos meses.

Se ve afectado el transporte público, el de mercaderías -por la adhesión del gremio de Camioneros-, la atención en dependencias públicas, el dictado de clases en las escuelas, la apertura de comercios y la actividad de bancos. Tampoco habrá recolección de basura, recarga de cajeros automáticos, ni provisión de combustibles, mientras que estarán afectado el funcionamiento de los centros médicos, donde sólo habrá atención en guardias y el SAME.

Agrupaciones de izquierda realizaron cortes en los principales accesos a la Ciudad de Buenos Aires desde las 6, donde se produjeron choques con la policía.

Hubo piquetes en Panamericana y 197, Acceso Oeste a la altura del Hospital Posadas y en el Puente Pueyrredón. Los cortes se replicaron en La Plata, Córdoba, Rosario, Mendoza, Neuquén, Jujuy y Tucumán, aunque con distinta intensidad.

"Y si no cambian tendremos que seguir adelante con la lucha. Y por supuesto la principal salida de esto es política porque hay que buscar una alternativa política para ganar las elecciones y después gobernar con un acuerdo entre los sectores que piensan la Argentina y salir de este endeudamiento que nos van a dejar", aseguró Héctor Daer, del triunvirato que conduce la CGT.

A diferencia de las CTA y las organizaciones sociales, la CGT resolvió que el paro sea sin movilización. Daer lo justificó diciendo que "la mejor foto" de una huelga es la que se ve a las estaciones de Constitución y Retiro vacías. "La mejor foto es que el país pare", insistió. Y, agregó, que en caso de movilizaciones el riesgo es que la noticia se traslade a lo que pueda suceder en algún piquete. El titular de UPCN e integrante del sector moderado de la CGT de los "independientes", Andrés Rodríguez, también señaló que la gestión de Macri debe "tomar medidas claras" como "paritarias que actualicen la pérdida de poder adquisitivo, un compromiso de protección del empleo y declarar la emergencia alimentaria".

El Gobierno cuestionó la medida. "No es el momento oportuno", dijo el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, quien también adelantó que se trabajará para permitir la libre circulación de los vehículos particulares.

"Todos estamos haciendo un esfuerzo colectivo, empresarios, trabajadores, gobierno nacional y gobiernos provinciales, para superar esta crisis", aseguró Sica, en una rueda de prensa acompañado del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich.

Si bien ambos ministros evitaron hacer públicamente una estimación económica del costo del paro, luego, por canales oficiosos, desde la Casa Rosada lo estimaron en 31.600 millones de pesos.