Noticias actualizadas las 24 horas Información clave para decidir
26 de abril de 2024
Seguinos en
Cárcel y juicios opacan a las "chicas" de Hollywood
Acusaciones, curas de desintoxicación y cárcel opacan la primavera de las estrellas más jóvenes de Hollywood como Paris Hilton, Nicole Richie y Lindsay Lohan
2 de junio de 2007
Acusaciones, curas de desintoxicación y cárcel opacan la primavera de las estrellas más jóvenes de Hollywood como Paris Hilton, quien pronto ingresará a la cárcel, Nicole Richie acusada de reincidencia y la actriz Lindsay Lohan, en tratamiento por conducir ebria.

El aterrizaje en el mundo de la fama parece más que forzoso para estas veinteañeras millonarias en la industria del entretenimiento estadounidense.

Víctima de un accidente automovilístico el pasado fin de semana en California, Lohan, de 20 años, fue interrogada bajo sospecha de conducir en estado de ebriedad, pero su caso podría empeorar si se presentan cargos relacionados con el hallazgo de
droga -aparentemente cocaína-, en su vehículo.

El rostro risueño de "Bobby", "The last show" y "Herbie: Fully Loaded" volvió el lunes a ingresar en un centro de desintoxicación por segunda vez este año después de este último incidente.

Además Lohan, que aún no tiene la mayoría de edad en Estados Unidos para consumir alcohol (21 años), reveló a principios de año que asistía a reuniones de Alcohólicos Anónimos.

"Lindsay ingresó a un centro intensivo de desintoxicación" el lunes, indicó su representante Leslie Sloane en un comunicado divulgado el martes.

Lindsay Lohan no podrá evitar asistir a una audiencia por estos hechos que bien podrían costarle una condena en la cárcel, pero dado que es la primera vez que afronta a la justicia no se descarta que el juez de turno tenga clemencia con la joven.

No es así el caso de Paris Hilton. La millonaria heredera de los hoteles que llevan su apellido fue condenada a principios de mayo a 45 días de cárcel por haber irrespetado los términos de una libertad condicional impuesta también por manejar con unas copas de más en la sangre.

Pese a suplicar en casi todas las instancias públicas que le perdonen, Hilton, de 26 años, tendrá que ingresar a una cárcel de mujeres en Los Angeles el próximo 5 de junio.

El mismo destino podría seguir su compañera de televisión y de la vida Nicole Richie, quien muy pronto deberá asistir a un proceso judicial por manejar bajo los efectos del alcohol y otras sustancias a sus 25 años.

La hija adoptiva del cantante Lionel Richie había sido condenada en 2003 por los mismos motivos y ahora la ley de California la acusa de reincidencia luego que a finales del año pasado fuera hallada conduciendo en sentido contrario por una
autopista en Los Angeles, una violación que prevé prisión.

Pero así es la vida en Hollywood, apuntó el académico Robert Thompson, especialista en cultura popular de la Universidad de Syracuse.

"Las celebridades que se portan mal son algo más bien frecuente y seguramente no van a desaparecer", declaró a la AFP.

El actor Robert Downey Jr. purgó una pena en la cárcel a finales de los años 1990 por drogarse. Christian Slater pasó dos meses preso en 1997 por actos violentos motivados por su adicción a la heroína. En 2006 tras ser brevemente arrestado, el actor Mel Gibson lanzó una diatriba antisemita que espeluznó a la jerarquía
hollywoodense.

Según Thompson, las estrellas "son el centro de atención, disponen muchas veces de importantes recursos financieros y tienen la costumbre de ver todos sus deseos cumplidos (...) ellas pierden el sentido de la realidad".

"Los Angeles es la ciudad de la tentación, los famosos se sienten con derecho a obtenerlo todo", apuntó Joel Stratte- McClure, cronista de Hollywood.

El punto novedoso en la actualidad es la explosión de la difusión de la información "rosa", una rúbrica de la cual tampoco fue marginada de las portadas y comidillas la cantante Britney Spears mientras atravesaba una depresión nerviosa que la llevó a raparse el pelo antes de ingresar a un centro de desintoxicación
hace dos meses.

Mencionando incluso el poder de los "blogs" en esta materia, Thompson sostiene que "la escena mediática es tan enredada, que ya nadie puede imaginarse que es capaz de guardar algún secreto" sobre acontecimientos como estos.

Además, según este académico, los jueces y la policía en Estados Unidos parecen menos dispuestos a perdonar a las estrellas, "por temor a parecer como los defensores de un sistema con dos balanzas". "Incluso creo que algunos son más duros con los famosos" que con los demás, agregó.

Las desgracias de las estrellas "no son más que una imagen exagerada de lo que pasa en Estados Unidos, es decir niños mal educados en cuanto a los peligros del alcohol y las drogas", estimó McClure invitando a Hollywood a "asumir sus responsabilidades".