Aunque la economía se recuperó, la baja fue mayor que en 2020. El interior estuvo mejor que el AMBA. El aumento de diciembre fue récord pero hubo fuerte baja a inicio del año
A pesar de una suba récord de 6,5% en diciembre y de que se estima que la economía creció cerca de 9%, 2021 terminó como el sexto año consecutivo con una caída del consumo.
Una baja de 2,1% incluso superior a la registrada en 2020, año de la pandemia.
La recuperación del consumo comenzó en julio y se mantuvo durante todo el segundo semestre. Pero no alcanzó para compensar las bajas de los primeros meses del año, que llegaron hasta el 18% como sucedió en marzo, según el análisis que realiza la consultora Scentia sobre consumo en supermercados y autoservicios independientes, todo lo considerado "self-service".
El interior del país fue el impulsor del crecimiento en diciembre, especialmente en los autoservicios. Y en todo el año logró caer menos que el área metropolitana.
Así, en números, en diciembre el consumo total subió 12,2% en el interior y cayó 1% en el AMBA, para dar un resultado de 6,5% de suba combinada. En el año, el interior retrocedió apenas 0,4%, contra un 4,2% en el AMBA.
Del mismo modo que en noviembre, el consumo en los autoservicios subió en diciembre 7,6%, contra 5,3% de las cadenas. De todas formas, los grandes supermercados salvaron el año: sus ventas subieron 3,2%, mientras que las de los autoservicios bajaron 6,2% y eso llevó a una baja conjunta de 2,1%.
El precio promedio ponderado se mantuvo en tendencia ascendente llegando en diciembre a 52,6%.
En diciembre, la única canasta que tuvo un leve retroceso (0,6%) fue la de desayuno y merienda en supermercados, el resto fueron todas positivas en ambos canales. Y, mientras que en el interior todos los segmentos subieron, en el AMBA cayeron todos menos bebidas con alcohol y productos de compra impulsiva.
Si se toman todos los canales juntos, los rubros que más crecieron durante diciembre fueron bebidas con alcohol (21,1%), productos impulsivos (16,4%), limpieza de ropa y hogar (7,6%) e higiene más cosmética (7,4%). Alimentación trepó 0,8%.
En cuanto al año completo, bebidas con y sin alcohol y productos de compra impulsiva fueron los únicos que terminaron en alza. El resto cayó. Alimentación, con una baja del 8%, fue el de peor desempeño. Le siguieron higiene y cosmética (con una caída de 3%), desayuno y merienda (3%), productos perecederos más fríos (1,5%) y limpieza y productos para el hogar (1,3%)