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Perfume de mujer: las piratas más temidas de la historia
Los mares del mundo no sólo tuvieron a los hombres como ladrones temidos. Muchas mujeres fueron parte de este grupo. Conocé a las más famosas
26 de agosto de 2023
No todos los piratas de la historia fueron hombres.

También hubo mujeres que dejaron su vida en tierra para surcar los mares bajo la bandera de la calavera, convirtiéndose en las protagonistas de aventuras y leyendas que, pese a ser menos conocidas que las de piratas como Barbanegra o el Capitán Kidd, bien merecen ser recordadas.

¿Pero cuales estas aventureras casi cinemotográficas que recorrieron los océanos desde las frías olas del mar Báltico en la era vikinga, hasta las furiosas tormentas del Mar de la China Meridional, pasando, como no podría ser de otra manera, por las aguas del Caribe.

La primera que podemos mencionar fue Alwilda, hija del rey escandinavo Synardus del siglo V, debía casarse con Alf, el príncipe heredero de Dinamarca.

Así lo habían decidido tanto los padres de ella, como los de él.

Sin embargo, la joven ansiaba una vida muy distinta a la que le habían preparado. Por eso, en cuanto recibió la noticia, Alwilda se disfrazó de marinero y huyó, junto a sus amigas de mayor confianza, en un barco. Surcando los mares, las mujeres encontraron una tripulación de piratas que habían perdido a su capitán. Los hombres consideraron que Alwilda era la persona ideal para ocupar tal cargo y le ofrecieron ponerse al mando de su navío.

De esta manera, la joven empezó su exitosa y legendaria carrera como pirata, acechando y aterrorizando a los barcos del mar Báltico y causando tales estragos que el rey de Dinamarca envió diversas tropas para capturarla.

La noble francesa Jeanne de Belleville (1300 - 1359) cambió el rumbo de su vida después de que su marido, lord Oliver IV de Clisson, fuera injustamente condenado por orden del rey Felipe VI de Francia, tras ser acusado de felonía.

El hombre fue decapitado en París y, posteriormente, su cabeza se llevó a Nantes, donde fue expuesta sobre una pica en la puerta de la ciudad.

Jeanne de Belleville, conmocionada y enfurecida por la pérdida, se unió a un grupo de hombres de Bretaña que, al igual que ella, no podían creer que Oliver de Clisson hubiera sido decapitado sin que se hubiera demostrado si la acusación era cierta o no.

La viuda, junto a sus cinco hijos, juró vengar la muerte de su marido, vendió las acciones de su familia y, con el dinero reunido, compró tres barcos que pintó de negro y en los que izó banderas de color rojo.

El grupo libró una guerra contra el rey de Francia y su séquito, atacando los barcos comerciales franceses y aterrorizando a todos los navíos que surcaban la costa de Normandía





Anne Bonney y Mary Read nacieron a finales del siglo XVII, la primera en Cork (Irlanda) y la segunda en Plymouth (Inglaterra), tal y como quedó registrado en la antología biográfica Historia general de los robos y asesinatos de los más famosos piratas publicada por el capitán Charles Johnson en 1724.

Anne Bonney abandonó a su marido para lanzarse a la piratería de la mano de su amante, el capitán John Rackham, apodado “Cálico Jack”.

Mary Read se hizo pasar por hombre para trabajar como soldado en la marina y el ejército, donde conoció al oficial de caballería que se convertiría en su esposo. La pareja abrió un pub llamado Three Horse Shoes en los Países Bajos, sin embargo, al poco tiempo él falleció y el negocio cayó en quiebra.

Arruinada, Mary Read decidió embarcarse de nuevo para trabajar en el mar del Caribe, donde su barco fue capturado por la tripulación de Cálico Jack en 1717.

Para librarse de la muerte, Mary Read se unió al séquito de John Rackham, convirtiéndose así en la segunda mujer a bordo después de Anne Bonney.

Estos famosos piratas saquearon barcos y lucharon en las aguas del Caribe, hasta que en 1720 fueron capturados por las autoridades cerca de Jamaica. Cuando el barco de Rackham fue atacado, las únicas que lo defendieron fueron Anne Bonney, Mary Read y otro hombre, ya que los demás (incluido el capitán) se habían emborrachado y estaban ebrios bajo cubierta.

Rachel Wall (1760 - 1789) nació en Pensilvania, pero tras casarse con George Wall a los dieciséis años, la pareja se trasladó a Boston.

Allí, ella trabajó como sirvienta y él como pescador. Preocupado por su mala situación económica, un día George Wall le propuso a su esposa embarcarse, junto a otros cinco marineros y sus amantes, en una goleta de pesca robada y dedicarse a la piratería.

El grupo se hizo a la mar y jugó la siguiente estrategia: cuando divisaban un barco a lo lejos, mandaban señales de auxilio para que estos se acercaran a rescatarlos y, entonces, asaltaban su navío y se hacían con sus pertenencias.

A lo largo del año que duró esta aventura, los piratas capturaron 12 barcos, además de cientos de objetos de valor y miles de dólares en efectivo.

Dicen que Ching Shih (1775 - 1844) fue la pirata más exitosa de la historia y la persona que comandó una de las flotas más grandes del siglo XIX, compuesta por 2.000 barcos.

Tras ser capturada por el pirata Zheng Yi en 1801, mientras ejercía la prostitución, la joven china decidió cambiar de vida y casarse con el bucanero. Juntos libraron múltiples batallas, entre ellas una en Vietnam, donde adoptaron a un niño al que llamaron Zhang Bao.

Cuando su marido falleció, Ching Shih ya había configurado una coalición pirata formada por 400 barcos y aproximadamente 50.000 marineros.

Para mantener el orden entre los piratas de su grandiosa tripulación, la capitana estableció un estricto código de conducta: no se podía atacar a una aldea que los había ayudado, no se podía robar un tesoro común, no se podía violar a las mujeres que hacían prisioneras y estaba rotundamente prohibido no obedecer a los líderes de la flota pirata.

Cualquiera que incumpliera estas normas era decapitado de forma inminente.

Pero no todo es de tiempos remotos, hay una pirata de Siglo XX, Sister Ping, quien azotó mares de China entre 1984 y 2000.

Operó en el Mar de China y se ocupó principalmente del tráfico ilegal de personas, trasladando inmigrantes chinos hacia Estados Unidos y Europa.

En el 2000 fue arrestada en Hong Kong y cumplió sentencia en una prisión estadounidense hasta su muerte, en abril del año pasado.
VIDEO - LA MUJER PIRATA