El rugby argentino se prepara para volver a la actividad después de un año y medio del parate que provocó la pandemia de coronavirus. Pero más allá de la felicidad de los clubes de todo el país por regresar a las canchas, la Unión Argentina de Rugby impulsará cambios en el juego.

En las últimas horas, el Área de Competencia y Desarrollo de la UAR le envió a las uniones provinciales un documento donde establece cómo será la nueva normativa para el scrum.

En una modificación trascendental para el deporte, la formación se jugará sin oposición para aquel equipo que tenga la posesión de la pelota. No habrá empuje entre las formaciones.

El scrum será simulado, es decir, el equipo que tirará la pelota la sacará de la formación sin empuje. La novedad provocó rechazos en el ambiente.

Hubo quejas de jugadores de primera división que consideraron que es "papelón" la decisión y desde Federaciones del Interior que relcmaron a la UAR tomar determinaciones sin consultar y que a ellos les llegan las novedades en "sobres cerrados"

Según indicó el sitio A pleno rugby, dicha medida fue establecida para todas las divisiones, desde los menores de 15 años hasta la división de mayores, y será adoptada en los partidos amistosos que se jueguen antes del reinicio de la actividad y en los campeonatos oficiales.

A las medidas para minimizar los riesgos de contagio que determinó el lunes en una reunión de presidentes (no habrá tercer tiempo ni uso de vestuarios), la Unión Argentina de Rugby (UAR) agregó de otra disposición, tendiente a reducir el riesgo lesiones graves luego de la larga inactividad.

La restricción estará vigente "hasta tanto los referentes de seguridad de la unión indiquen que se puede pasar a la segunda etapa", que consistirá en empujar hasta un metro y medio, en todas las divisiones. El comunicado de la UAR no hace ninguna referencia a la posibilidad de volver a jugar el scrum liberado.

rob