Sin aceptar preguntas de los periodistas a los que había convocado, el vicepresidente Amado Boudou estalló de furia contra el juez Daniel Rafecas, quien lo investiga por presunto tráfico de influencias, y denunció que el allanamiento a una de sus propiedades fue un "brutal ataque a las instituciones".

También denunció que el Juzgado de Rafecas parece una "agencia de noticias", al cuestionar que se filtre información sobre las medidas adoptadas en la causa.

"Yo tenía una imagen muy distinta de Rafecas", se lamentó el vicepresidente, y disparó: "Me queda claro el funcionamiento de este Juzgado", al sugerir que es parcial en su contra.

Boudou convocó a una urgente conferencia de prensa en el Senado luego de que la Justicia allanó el miércoles uno de sus departamentos en Puerto Madero.

"Mi problema no es Ciccone, mi problema es Boldt", sostuvo el vicepresidente al señalar a esa compañía como la responsable de la causa abierta en su contra por presunto tráfico de influencias.

Boudou recordó que tuvo "20 causas penales" y dijo que "18 están cerradas porque eran mediáticas".

El vicepresidente descalificó también a los periodistas por cubrir el allanamiento y los calificó de “cachafaces”.

El vicepresidente consideró que la investigación abierta en su contra “es un ataque mediático de las mafias”. "Es una vergüenza y es lamentable que en lugar de ocuparnos de cosas de los argentinos, estemos ocupándonos de la Argentina de Magnetto, La Nación y Perfil”, sostuvo el vicepresidente desde el Salón Illia del Senado Nacional.

Denunció un "brutal ataque a las instituciones que llevan adelante las mafias y sus esbirros", al responder a las investigaciones por supuesto tráfico de influencias en las que se encontraría involucrado. El vicepresidente consideró que esas "mafias" tienen como principales referentes al "señor (Héctor, CEO de Grupo Clarín) Magnetto y tiene actores menores que llegan hasta el Poder Judicial".