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Buenos Aires testigo de una guerra narco
El asesinato de un colombiano en plena Recoleta es parte de una venganza de un capo de la droga. La Argentina testigo de una batalla sin cuartel
21 de abril de 2012
Las investigaciones del asesinato de un colombiano el martes en plena Recoleta ajusticiado en un ataque mafioso se trataría de una interna de un cartel de drogas de ese país y habría sido ordenado por del capo narci Daniel “El Loco” Barrera Barrera, prófugo de la Justicia.

La víctima fue identificado finalmente como Jairo “Mojarro” Saldarriaga, ex jefe de los sicarios de Barrera y su ejecución en pleno centro porteño habría sido por una traición.


Saldarriaga, de 39 años fue asesinado el martes pasado de cinco balazos por un sicario en Barrio Norte mientras usaba la identidad falsa de Carlos Brausin García, era un verdadero “peso pesado”: ex guerrillero de las FARC transformado en narco paramilitar, lideraba un ejército de 20 sicarios.

La principal hipótesis de los investigadores argentinos, que por fichas dactilares y testimonios ya confirmaron la verdadera identidad del muerto, es que Barrera mandó seguir hasta Buenos Aires y decidió ejecutarlo sin piedad cuando aparentemente Saldarriaga, tenía su propio negocio.

Barrera acusaba a su víctima, al igual que a otros miembros de su entorno más cercano, de haber entregado a la Policía en febrero de 2011 un cargamento de 500 kilos de cocaína que había partido hacia México.

Por este hecho Saldarriaga cayó en desgracia, su cabeza tuvo precio y su puesto operativo fue rápidamente ocupado por Carlos Angulo Salazar, alias “Pollo”.

El narco asesinado el martes pasado en Barrio Norte operaba en Argentina junto a una importante banda de traficantes de cocaína, que se halla instalado en la zona del partido bonaerense de San Martín.