El ex dictador Jorge Rafael Videla negó de manera terminante que su gobierno haya sobornado a los integrantes de la selección peruana de fútbol, para dejarse ganar por Argentina, y permitir la posterior clasificación del equipo albicelste a jugar la final del Mundial contra Holanda en 1978.

Las declaraciones de Videla, de 86 años, aparecen en el libro "Disposición Final" del periodista Ceferino Reato, de reciente publicación. "No fue verdad, en absoluto; yo, por lo menos, no saqué un peso del bolsillo. No se habló de un posible arreglo antes del partido, ni en el gobierno, ni en la Junta", dice el ex dictador ante una pregunta específica sobre el tema.

El equipo argentino necesitaba ganar por goleada un encuentro de la segunda fase contra Perú, en Rosario, y finalmente se impuso holgadamente por 6 a 0, tras lo cual surgieron los rumores.
Videla contó que cuando salió a la luz el presunto arreglo con los integrantes de la selección peruana involucró a los integrantes del equipo campeón porque tenía la certeza de que el tema "les caía mal y los estimulaba a que contestaran".

"El cuento sobre el arreglo con los peruanos surgió enseguida; el arquero peruano (Ramón Quiroga) había nacido en Argentina y eso agravó los rumores", explicó.

Videla, alojado en la Cárcel Federal de Campo de Mayo por crímenes de lesa humanidad, aseguró que Holanda resultó ser un rival durísimo y que además del partido estrictamente deportivo se jugó otro de índole político.