Moria Casán declaró ante la fiscal que investiga la desapración de un collar de 85 mil dólares que le prestaron el viernes para un show en Paraguay y ahora la justicia de ese país busca el empresario Luciano Garbellano quien la acompañaba en esa paresentación.

“Está todo bien y la fiscal me dio la libertad”, dijo Moria Casán a la salida de la fiscalía donde declaró después de haber quedado detenida el sábado en el Aeropuerto de Asunción.

“A mi no me afecta nada. El que nada debe, nada teme. Soy una mujer honesta. Terminé de trabajar puse mis joyas en una caja, empezó a entrar gente que me vino a saludar y las cosas desaparecieron”, aseguró la actriz.

La vedette pasó la noche detenida en uan comisaría local y luego de ser liberada se dirigió a la casa de la familia de Larissa Riquelme y comentó que tiene previsto regresar este lunes a Buenos Aires para estar en ShowMatch.

La fiscal de la causa, Celeste Campos Ross, confirmó que ordenó la detención del amigo y socio de Casán, Luciano Garbellano, y de Alexis, el asistente de la vedette, para continuar averiguando sobre la desaparición de las joyas.



Moria prestó declaración indagatoria en el marco de la investigación que realiza la fiscal por el presunto robo de unas joyas, que no fueron devueltas a Juan Armando Benítez, propietario de la firma "Armando Joyas", con el que había acordado usarlas en el Mega Fashion Show, realizado el viernes en el Centro de Convenciones de la Conmebol.