El juez Federal Norberto Oyarbide deslindó responsabilidades en que siempre los sorteos de las causas más polémicas para el Gobierno nacional llegue siempre a su juzgado y dijo que hay que "preguntarle a Dios porque me tocan siempre a mi"

"Yo no hago el sorteo, es electrónico. Y el día del apagón incluso se hizo manualmente y llegó a mi juzgado. Averigüen en la Cámara (Federal)", argumentó el magistrado.

Según explicó, la sensación de que las causas importantes recaen en su escritorio puede responder a que siempre se trata de "temas muy sonoros y que tienen muchas reverberancias".

"De todas maneras a la hora de mi trabajo no aparece nadie con una escopeta. Con la palabra presión uno puede imaginarse distintos tipos de situaciones, como personas que vienen a amenazarlo o que lo golpean. Pero no sucede nada de eso. Es sólo la presión que uno tiene personalmente en su propia alma", explicó.

Oyarbide negó que analice jubilarse y recordó que el ministro de la Corte Suprema Carlos Fayt tiene más de 90 años y sigue en su cargo.

"Voy a continuar todo el tiempo que Dios me dé", anticipó, y a la vez, confirmó que en se casará con su pareja, Claudio Blanco, aunque aún no fijo fecha para ese momento tan especial en su vida.

"Van a estar todos los periodistas en una mesa. Quiero que vengan y cuenten todo lo que vean", anunció muy emocionado con ese evento