En un hecho inédito, y con gestos que marcan los nuevos tiempos de la Iglesia Católica, el Papa Francisco se reunió hoy con su antecesor, Benedicto XVI, y rezaron codo a codo, en una imagen que generó gran impacto mundial.

El Papa Francisco visitó a su antecesor, que fue a recibirlo al helipuerto, en la residencia papal de Castelgandolfo. En las imágenes difundidas por el Vaticano, se lo ve a Joseph Ratzinger dándole la bienvenida a Jorge Bergoglio en el helipuerto de la residencia, recibiendo un obsequio, compartiendo un oración en la capilla y luego una charla en un living.

Las imágenes reflejaron un hecho sin precedentes, ya que es la primera vez en los casi dos mil años de existencia de la Iglesia católica que dos Papas, uno en funciones y otro emérito, se reúnen.

Según informó el padre Federico Lombardi a la prensa fuera del Palacio Apostólico, el encuentro privado entre el Papa Francisco y el papa emérito Benedicto XVI en Castelgandolfo duró "entre 40 y 45 minutos". Cuando ambos fueron a la capilla de Castelgandolfo a rezar, Benedicto XVI quería que el Papa se sentase en el faldistorio de honor, pero Francisco quiso que se sentaran juntos en el mismo banco a rezar.

"Somos hermanos", dijo, según relató Lombardi.

Para el vocero vaticano el encuentro entre ambos fue "un momento de altísima, profundísima comunión" y añadió que la reunión permitió a Benedicto XVI "renovar su acto de reverencia y obediencia a su sucesor".