Boca logró un importante triunfo en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores al derrotar en la Bombonera al Corinthians 1 a0, con gol de Nicolás Blandi, en el segundo tiempo.

Fue valioso porque el equipo que dirige Carlos Bianchi se lo vio con mucha solidez y jugó quizás el mejor partido de la temporada, muy concentrado y con mucha actitud.

El gol de Blandi llegó a los 14 minutos del complemento cuando puso el pie derecho en el momento adecuado y estableció el 1-0, a los 14 minutos del segundo tiempo.

El delantero corrigió así la dirección de un remate de Cristian Erbes, quien había probado puntería apenas ingresado al área grande.

Sin Riquelme, quien no jugó por estar lesionado y vio el encuentro desde uno de los palcos, Boca demostró que esta vivo y en la Copa Libertadores saca temple donde pareciera que no hay ya nada mas.

De esta manera rompió con una racha negativa de cuatro partidos sin triunfos entre torneo local y Copa, y se tomó una revancha del equipo que le ganó al final en 2012.

Lo único negativo para el xeneize fue la expulsión del mediocampista Pablo Ledesma, la que determinó el árbitro chileno Enrique Osses a los 39 del segundo período, luego que marcará un gol adelantado y saliera a festejar sin darse cuenta que todo fue inhabilitado.

Así Boca irá más armado al desquite que se jugará en San Pablo el próximo miércoles 15 de mayo y donde se decidirá la suerte de quien pasa a cuartos.