Sin sorpresas, nuevamente el alemán Sebastian Vettel se impuso en el Gran Premio de Singapur de Fórmula 1 y así sumó su séptimo triunfo sobre una temporada de 12 carreras y que permite imaginar que el actual campeón del Mundo acaricia su cuarto título.

Vettel amplió a 60 puntos su distancia en la clasificación general de la temporada respecto de su escolta, el español Fernando Alonso (Ferrari), que terminó segundo en el GP asiático, por delante del finlandés Kimi Raikkonen (Lotus).

El alemán Nico Rosberg fue cuarto, justo por delante de su compañero en Mercedes, el británico Lewis Hamilton, que continúa tercero del Mundial con 151 puntos.

Los número del alemán siempre sorprenden, aunque su grandeza ya esté naturalizada. Esta fue la séptima victoria en la temporada, la tercera consecutiva (tras las de Spa y Monza) y la número 33 de su carrera.

"La salida fue terrorífica, Nico (Rosberg, de Mercedes) salió mejor, no tuve otra opción que dejarle la parte interna, pero luego pude superarlo, y eso ha sido crucial porque nos permitió alcanzar un buen ritmo en carrera", dijo Vettel minutos después de la premiación.

Al ser consultado por los 60 puntos de ventaja sobre Alonso, el piloto de Red Bull aseguró que prefiere "disfrutar el momento". "El coche estuvo fantástico, y esto no ocurre por casualidad, ha habido mucha gente trabajando", finalizó.