El gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota, afirmó que "ninguno de los gobernadores está negociando en condiciones de normalidad", y además, pidió disculpas a los cordobeses “porque esperaban mucho más de nosotros” tras los incidentes y saqueos que se registraron en la provincia por una huelga policial, y agradeció al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, el envío de gendarmes.

Ambos funcionarios ofrecieron una conferencia de prensa desde la Casa Rosada luego de reunirse esta mañana tras los reclamos policiales de la semana pasada, que luego se extendieron en diversos puntos del país, y por el cual De la Sota protagonizó un duro cruce con la Nación ante el pedido de asistencia.

“Hablando la gente se entiende”, dijo De la Sota, tras el encuentro con Capitanich y agregó “que la soberbia no nos conduzca por el peor camino”.

Para el mandatario cordobés, "ninguno de los gobernadores está negociando en condiciones de normalidad", con los policías acuartelados que desencadenaron saqueos en varias provincias del país.

Y advirtió: "Los policías no se pueden declarar en guerra porque los ladrones no se declaran en huelga".

“Pido disculpas a los cordobeses porque esperaban mucho más de nosotros, era impensable que el reclamo terminara en esto”, reflexionó De la Sota. Aunque aclaró que “en Córdoba se restableció el orden”.