Por las dudas, el amigo del vicepresidente Amado Boudou, José María Núñez Carmona, prefirió no hablar y sólo presentó un escrito ante el juez federal Ariel Lijo.

Con nuevos abogados, Núñez Carmona no contestó preguntas ni del magistrado ni del fiscal Jorge Di Lello.

Era la tercera vez que lo citaban y si no se presentaba el juez le había advertido que lo haría detener por las fuerzas de seguridad.

Debió presentarse imputado en la causa que investiga las supuestas negociaciones irregulares para el rescate financiero de la imprenta Ciccone y su posterior contratación para fabricar billetes.

Su nuevos letrados son Ramiro y Darío Rubinska.

Se hicieron cargo de la defensa tras la renuncia de Diego Pirota, el letrado que también representaba a Boudou.

El vicepresidente intentó despegarse de las acciones de su amigo y, según varios testimonios y pruebas que constan en el expediente, quien lo representó en las sucesivas negociaciones por la imprenta Ciccone.