El Gobierno enviará la semana próxima al Congreso un proyecto de ley de "Sinceramiento Fiscal" que tendrá como objetivo central recaudar fondos para el pago de miles de juicios iniciados por jubilados y reajustar haberes previsionales.

El presidente Mauricio Macri prevé realizar este viernes a las 10:30 el anuncio del pago de sentencias a jubilados que vienen realizando reclamos desde hace varios años, en el marco de un megaproyecto de "Sinceramiento Fiscal".

El anuncio, que forma parte de una iniciativa que incluye un amplio blanqueo de capitales, se realizará en un centro de jubilados.

Será en San Juan al 3200, en el barrio porteño de San Cristóbal, y junto a Macri estarán el jefe de Gabinete, Marcos Peña; la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley; y el director ejecutivo de la ANSeS, Emilio Basavilbaso, entre otros funcionarios.

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo que el objetivo es "terminar con muchos años de una deuda enorme con los jubilados".

También el propósito de la iniciativa oficial es paliar parcialmente la crítica situación y el malhumor general ante el incesante aumento de precios y los efectos del tarifazo en servicios públicos.

La iniciativa oficial contempla el pago de juicios que unos 300 mil jubilados iniciaron al Estado para que sus haberes sean reajustados y la promesa de quienes no hicieron juicio de que no harán demanda y aceptarán una quita de entre 20 y 30%.

Según datos oficiales, los fondos en el exterior sin declarar superan los 212.000 millones de dólares, aunque estimaciones privadas lo ubican por encima de los 400 mil millones.

La intención es que ingresen como mínimo unos 60.000 millones de dólares y que lo recaudado por la penalidad que les aplicará (de entre 10 y 15%) permita el pago a jubilados.

Si bien los reajustes y el pago de las sentencias previsionales dependerá de cómo se vaya desarrollando el blanqueo y los fondos que ingresen, la idea oficial es que se vayan ajustando a un ritmo de 100 mil haberes por mes.

En caso de aprobarse el proyecto y ponerse en marcha, se irán pagando unos 300 mil juicios pendientes y también está previsto saldar la deuda con quienes no presentaron demandas.

Sumados todos los casos, se podrían llegar a beneficiar alrededor de 2 millones de jubilados de los 6,5 millones que hay en el país de las cajas nacionales.

Unos dos millones de jubilados tendrían un importante ajuste en sus haberes, que pasarían de 7.000 a 11 pesos mensuales.

En simultáneo, el Ejecutivo anunciará una iniciativa para establecer una pensión universal a la vejez, equivalente a un 80% del haber mínimo y no habrá más moratorias previsionales.

Además, se desarticularía el Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional Argentino, compuesto por diversos tipos de activos financieros, para conformar un Consejo para la Sustentabilidad del Sistema de reparto y, por otra lado, se va a refrendar el acuerdo Nación Provincia para la devolución del 15% de Coparticipación.

"Nuestra idea es que a los abuelos los financien los que más tienen. No quiero dar más detalles hasta que lo plantee mañana el presidente Macri", sostuvo Frigerio.

En esa línea, indicó: "Vamos a financiar esa deuda con la contribución que tienen que hacer los que más tienen en la Argentina, y que hasta ahora no han contribuido impositivamente con una parte de sus recursos".

El ministro consideró que una vez que los fondos que genere el blanqueo de capitales -que también será anunciado por Macri- "se transparenten, comenzarán a tributar impuestos y habrá un mayor ingreso fiscal" para hacer frente, por caso, al pago de sentencias previsionales.

"Nuestro plan es financiar la deuda con la contribución del blanqueo", enfatizó Frigerio, quien así relativizó que la deuda con los jubilados pueda ser honrada con recursos provenientes de la venta de acciones que la ANSeS mantiene en numerosas empresas privadas.

Durante el feriado del 25 de mayo, Macri fue quien confirmó el pago a jubilados: "El viernes vamos a hacer una propuesta para terminar con el flagelo al que están sometidos los jubilados que inician juicio y no llegan a ver el resultado", sostuvo el jefe de Estado.

En ese sentido, aseguró: "Vamos a pagar los juicios pendientes que tienen. Para ello vamos a pedir una ayuda a todos aquellos que tienen. Llegó la hora de que pongan el hombro y blanqueen y paguen el costo de no haberlo declarado antes".

Por su parte, el Defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, consideró que si el Gobierno paga las sentencias judiciales por reajuste de haberes, debería tener en cuenta también a los jubilados que no recurrieron a la Justicia.