El presidente Mauricio Macri mantuvo una reunión de una hora con Marcelo Tinelli en su despacho de la Quinta Presidencial de Olivos. Luego, el conductor de ShowMatch agradeció al presidente por recibirlo y twitteó: "Muy linda, profunda y divertida charla. Hablamos de todo".

Además de mantener un charla, entre risas utilizaron la popular aplicación Snapchat para cambiar sus caras.

Luego del debate que se generó por las imitaciones y el humor político del programa que conduce Tinelli, el presidente lo citó a Olivos donde no se vio la tensión, y dicen que hubo "muy buena onda".

Macri aprovechó la oportunidad para decirle a Tinelli que no le molestaba el sketch que realiza el actor Fredy Villarreal. "Me encanta y me divierte esta imitación a diferencia de la de (Martín) Bossi que me mataba", afirmaron que dijo el presidente.

La relación se había enfriado desde la asunción de Cambiemos en el Poder Ejecutivo. Dicen que el entonces jefe de Gobierno de la Ciudad no le perdonó al periodista que le haya dado aire a Daniel Scioli para cerrar su campaña presidencial.

Luego, el vice de San Lorenzo se quedó afuera de la Comisión Regularizadora tras haber manifestado públicamente sus intenciones de tener un lugar relevante en la reconstrucción del fútbol argentino. Y empezaron las imitaciones que irritaron al poder.

La polémica estalló luego de que un medio gráfico publicara una frase de Macri en donde sostenía: "Tinelli me satiriza de mala manera ante tres millones de personas en televisión". El jefe de Estado aclaró que se trató de un off the record no respetado por el periodista que lo publicó.

Durante la reunión trataron diferentes temáticas: familia, amigos, Boca, San Lorenzo y AFA incluida. Acerca de esto último, Tinelli habría mencionado el cambio de estatuto pero Macri respondió que no era el momento aún.

Voceros de Casa Rosada informaron que el encuentro se realizó a instancias de un pedido que había cursado la semana pasada el conductor.