Otro revés en los tribunales para los Kirchner.

La sala I de la Cámara Federal penal porteña ratificó el embargo de más de 5 millones de dólares dispuesto en julio último por el juez federal Julián Ercolini hallados en una caja de seguridad y dos cajas de ahorro a nombre de Florencia Kirchner, la hija de la ex presidenta Cristina Fernández.

El dinero había sido incautado por la Justicia en el marco de la causa Hotesur, donde se investigan presuntos delitos en torno a la sociedad administradora de los hoteles de la ex familia presidencial en el sur del país.

El objetivo es impedir que sea retirado y para afrontar un decomiso ante una eventual condena.

La plata embargada y que permanecerá bajo la órbita judicial son US$ 4.664.000 que se encontraban en una caja de seguridad del Banco Galicia y otros USD 1.032.144 en una caja de ahorro del Banco Francés y $ 53.280 en otra caja de ahorro en esa moneda de la misma entidad.

El embargo había sido pedido por los fiscales Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques luego de trascender, a través de la diputada Margarita Stolbizer, que ese dinero había sido transferido por la ex presidenta a favor de su hija luego de ser indagada por el juez Claudio Bonadio en la causa por la venta de dólares a futuro y con el supuesto fin de evitar un embargo.

Las dos cajas de seguridad -sólo una de ellas tenía los más de cuatro millones de dólares- fueron contratadas el 3 de marzo de este año, cuatro días después que Bonadio convocara a la ex presidenta a prestar declaración indagatoria. Cristina Fernández fue finalmente procesada en un fallo que ahora revisa la sala II de la Cámara Federal. "El direccionamiento de los embargos preventivos hacia el dinero detentado por Florencia Kirchner en el Banco Galicia aparece coherente con la referida tesis de investigación, que ubica a la nombrada dentro del engranaje societario utilizado para canalizar los fondos de origen ilícito que los empresarios beneficiados por la irregular concesión de obra pública habrían otorgado a la familia presidencial", dijo el camarista Jorge Ballestero en el fallo firmado hoy junto con Eduardo Farah y Eduardo Freiler, quien votó en disidencia.

La Justicia investiga en esta causa la presunta existencia de una asociación ilícita entre la familia Kirchner y empresarios como el detenido Lázaro Báez o Cristóbal López, cuyas firmas supuestamente alquilaban habitaciones de los hoteles de la ex familia presidencial en una supuesta devolución por concesiones o beneficios otorgados por el Estado.

Los camaristas, también por dos votos contra uno, rechazaron el planteo de nulidad efectuado por la defensa de la ex presidente, a cargo del abogado Carlos Alberto Beraldi, a raíz de la obtención de la información sobre la existencia de esos movimientos de dinero, que atribuyeron a una filtracikón del juez Claudio Bonadio, quien originalmente tuvo a su cargo la causa Hotesur.