En su paso por Córdoba, Mauricio Macri volvió a ponerse al frente de la embestida contra Alejandra Gils Carbó. Apuntó que "es una militante kirchnerista" que ha utilizado su lugar "para detener, demorar y enturbiar" las investigaciones contra ex funcionarios y dijo lamentar "que insista en permanecer en el cargo" ya que "lo lógico es que el Presidente proponga un procurador".

"No es una procuradora imparcial como corresponde. Es una militante política que ha obstruido la investigación de hechos de corrupción del Gobierno anterior y que ha desatado con fiscales que movió y designó irregularmente decenas de causa contra nuestro Gobierno sin fundamento en la mayoría de casos", arrancó Macri al ser consultado sobre la postura definitiva de la Casa Rosada sobre la situación de Gils Carbó, luego de que el fiscal Eduardo Taiano pidió su indagatoria en el marco de la causa por la compra irregular de un edificio.

Aunque evitó referirse a los rumores que dan cuenta de que estaría dispuesto a removerla por decreto, el jefe de Estado cuestionó la actitud de la procuradora de no renunciar. "Lamento que ella insista en permanecer en el cargo porque lo lógico es que el Presidente proponga un procurador y que el Congreso lo apruebe", indicó. "Obviamente -prosiguió- creemos que ella hace un uso indebido del enorme poder que tiene la Procuración" General de la Nación.

Por último, Macri insistió en que "ella es una procuradora de manifiesta militancia kirchnerista, que viene del Gobierno anterior y que ha utilizado ese lugar para detener, demorar y enturbiar las investigaciones de corrupción del Gobierno anterior y para crear sistemáticamente imputaciones al Gobierno, que si de algo puedo estar orgulloso es de haber traído a los argentinos un equipo que trabaja con honestidad".