El presidente Alberto Fernández admitió hoy que la "explosión" del viernes en los bancos puso en "peligro" todo el "esfuerzo" que el Gobierno hizo para frenar la propagación del coronavirus mediante una rigurosa cuarentena que se implementa desde el 20 de marzo último.

"Hoy parece que está más ordenado", evaluó el jefe de Estado, y señaló: "Mandamos a su casa a lo que no les toca cobrar".

El Presidente advirtió que "no puede volver a pasar" la situación que se vivió el viernes en todo el país, con miles de personas agolpadas frente a las sucursales para cobrar los haberes y asignaciones, todo junto.
"Lo que es importante es que todo tengamos en cuenta la importancia de la cuarentena", insistió.

Fernández se lamentó por la desorganización en las entidades bancarias y las extensas filas en pleno aislamiento social y apuntó: "Pucha, todo este esfuerzo en un día lo ponemos en peligro".

"Se mezcló gente que cobraba la Asignación Universal y la ayuda especial con personas que no habían cobrado en su momento la jubilación", dijo en diálogo con Radio Mitre.

"Fueron a los bancos gente que no debía. El cronograma de pagos no lo respetó la gente", sostuvo. El presidente dijo estar "preocupado, enojado y molesto" por lo ocurrido en las puertas de los bancos en todo el país, donde se formaron largas filas de jubilados y beneficiarios de asignaciones sociales.

"Nadie preveía que iban a aparecer todos esos jubilados", dijo el mandatario, y manifestó su intención de que hoy mejore la situación con el nuevo cronograma de pagos según el número de documento.

Y prometió: "Hoy volveremos un poquito al orden".