Los votos por correo, adelantados por 70 millones de estadounidenses para cuidarse del contagio de Covid y evitar largas colas el día de votación, se volcó decididamente hacia el candidato demócrata Joe Biden y lo están catapultando a la Presidencia de los Estados Unidos.
El recuento avanza a cuentagotas y está revirtiendo triunfos de Donald Trump en la estratégica Georgia y le darían la victoria al postulante demócrata en Nevada, con lo cual obtendría 286 votos en el Colegio Electoral, más que suficientes para convertirlo en Presidente a partir de enero.

El problema, como siempre, es Trump, ya que el magnate no está dispuesto a reconocer una derrota y promete ir a la Corte Suprema para ganar en la Justicia lo que aparentemente no podrá en las urnas, generando una conmoción política sin precedentes en la primera potencia mundial.

En Georgia no ha ganado ningún candidato demócrata desde 1992, cuando lo hizo Bill Clinton. El estado es uno de los que ha sido objeto de demandas por parte del equipo de campaña de Trump. Las opciones del presidente de lograr su reelección se reducirían si pierde Georgia.

El conteo en los otros estados bisagra también va lento con diferencias de apenas miles de votos entre ambos candidatos. Y es posible que haya que esperar hasta la noche para conocer un resultado definitivo, si es que lo hay.

En Nevada, el demócrata iba este viernes adelante con 11.438 votos. Lo mismo en Arizona con 47.052. El caso de Pensilvania

El presidente llevaba la delantera con 18.229 votos en Pensilvania, pero esa diferencia con el demócrata se va achicando, en un avance notable del demócrata. El jueves Biden estaba más de 600.000 votos por detrás de Trump en ese estado del noreste del país.

El comisionado municipal de Filadelfia, Pensilvania dijo que otros 50.000 votos serán anunciados "en la próxima hora o dos".

Pensilvania ofrece 20 electores. De acuerdo con la CNN, aún quedan por escrutar unas 163.000 papeletas. El repunte de Biden en Georgia y Pensilvania comenzó cuando se empezaron a computar los millones de votos llegados por vía postal, un terreno en el que los demócratas han dominado históricamente.