La agrupación que lidera Raúl Castells irrumpió en la sede del gobierno porteño, entre gritos y empujones. Accedieron al playón principal tras forzar e incluso saltar la reja de ingreso, en medio de una protesta este martes.

“Hace horas estamos esperando a que nos atiendan, se creen que son una monarquía. Desprecian a los vecinos”, expresó, a los gritos, el dirigente. “Ni siquiera quisieron recibir un petitorio. Nosotros lo que queremos es charlar, y hacerles nuestro pedido". No puede ser que sean tan estúpidos", exclamó.

“Tenemos un montón de compañeros jubilados. ¿Cómo nos van a cobrar un pan dulce a crédito?”, se preguntó. “Fueron ellos los que provocaron esto”, dijo. “Estamos denunciando a (Horacio) Rodríguez Larreta, que se hace el moderado, el democrático y es peor que el feudalismo", acusó.

Además, comparó al jefe de Gobierno con la actitud adoptada por las autoridades de la provincia de Formosa, en donde se adoptaron rígidas medidas en los últimos meses para prevenir contagios de COVID-19. "Gildo Insfrán, un poroto en comparación a cómo han actuado con nosotros”, expresó el líder del Movimiento Independiente de Justicia y Dignidad (MIJD).

A los pocos minutos, desde el interior de la Jefatura de Gobierno confirmaron que recibirían, de a uno por vez, a los delegados de los barrios presentes, entre los que Castells mencionó a La Boca, al Barrio 31, Retiro, entre otros. “Pedimos que ayuden con bolsones navideños que incluya un pan dulce, que sale entre $900 y $2500 y nos sentimos humillados por tener que sacarlo en cuotas”, solicitó.