Los jugadores de Vélez , Thiago Almada y Miguel Brizuela fueron imputados este martes por la justicia en el caso que investiga el abuso sexual de una joven en una fiesta organizada en la casa de su compañero Juan Martín Lucero en el partido bonaerense de San Isidro.

Ya había sido imputado el director técnico Juan José Acuña, quien está prófugo de la justicia desde diciembre pasado.

La causa está en manos de la fiscal, Laura Zyseskind, a cargo de una unidad especializada en violencia de género, la misma que logró la condena contra Fernando Farré por el femicidio de su mujer, Claudia Schaefer, en 2015.

La joven que denunció haber sido víctima de abuso sexual en una fiesta organizada por los futbolistas de Vélez había logrado ampliar su declaración el 22 de diciembre pasado.

Fue entonces cuando dio detalles del contexto de la fiesta: habló de drogas y alcohol. También aseguró que le negaron ayuda cuando ella la solicitó. Apuntó contra Thiago Almada y Miguel Brizuela por la presunta violación. Y señaló a Ricardo Centurión y al dueño de la casa, Lucero, por falta de asistencia.

De esta manera, Miguel Brizuela y Thiago Almada son los primeros de los jugadores que deberán aclarar las cosas ante la Justicia.

En junio del 2020, Miguel Brizuela, había sido denunciado por violencia de género contra su pareja Melina Neto. La mujer declaró que el futbolista de Vélez la había golpeado con su puño en el ojo izquierdo tras una discusión en su casa de la localidad bonaerense de San Miguel.

La Justicia le había ordenado una restricción perimetral al defensor central del Fortín.

El departamento de género del club de Liniers, separó en aquella ocasión a Brizuela, pero luego fue reincorporado al plantel de Mauricio Pellegrino, ya que la causa quedó archivada.

rob