Este domingo se conoció la noticia de la muerte de Fructuoso Álvarez González, el auto de la Masacre de Flores. Ante esta noticia, el único sobreviviente del incendio que mató a toda la familia, Matías Bagnato, se volcó a Twitter.

“Hoy sí por fin puedo decir que se terminó. Mami, pa, Fer, Ale, Nico descansen en paz. Los amo con todo mi corazón”, escribió Bagnato en su cuenta.

Por el momento, pese a los intentos de la presa de contactarse con él, el sobreviviente no dará declaraciones. Hablará este lunes en una conferencia de prensa prevista para las 11:00.
Álvarez González permanecía internado desde el 4 de abril en el Hospital Zonal General de Agudos Dr. Alberto Antranik Eurnekian del Penal de Ezeiza. Sufrió múltiples infartos y falleció esta mañana a los 63 años.

La tragedia que terminó con la vida de casi una familia completa ocurrió el 17 de febrero de 1994 cuando se inició un incendio en una casa de la calle Baldomero Fernández Moreno y Pumacahua, en el barrio de Flores.

Las víctimas fatales fueron José Bagnato, de 42 años; su esposa Alicia Plaza, de 40; sus hijos Fernando (14) y Alejandro (9) y Nicolás Borda (11), un amigo del menor de ellos que esa noche se habí­­a quedado a dormir.

Los investigadores determinaron que el incendio había sido originado de manera intencional por Álvarez González, exsocio de José Bagnato, quien arrojó dos bidones con combustible y encendió el fuego.

El imputado fue condenado a prisión perpetua en 1995, pero por tener su ciudadanía española, en 2004 fue extraditado a ese país para terminar de cumplir su condena. En España lo liberaron y fue recapturado en la Argentina en 2011, después de amenazar de muerte a Bagnato.