La vocera del organismo dijo que las discusiones “siguen siendo muy productivas”, pero prefirió no especular sobre un posible perdón para Argentina por metas incumplidas
Luego de la misión técnica que visitó la semana pasada Buenos Aires para la primera revisión del acuerdo por el Programa de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés), el Fondo Monetario Internacional (FMI) evitó este jueves dar precisiones sobre cuándo el
board del organismo podría definir la aprobación del desembolso de US$2000 millones pautado para esta etapa del acuerdo.
También señaló que las discusiones “siguen siendo muy productivas” y que hay un “reconocimiento compartido de la necesidad de seguir construyendo
buffers contra los riesgos externos”, al responder sobre la acumulación de reservas.
“Las discusiones para la primera revisión continúan y siguen siendo muy productivas. El programa, como hemos dicho antes, sigue dando resultados positivos”, dijo Julie Kozack, directora de comunicación del FMI, en una conferencia de prensa en Washington.
También confirmó que en este momento hay una misión técnica argentina en la capital norteamericana para avanzar con las discusiones con el organismo. Está liderada por el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y el viceministro de Economía, José Luis Daza.
“Primero, las conversaciones entre el equipo y las autoridades tienen que llegar a una conclusión, y se tendría que llegar a un acuerdo a nivel del
staff. Y una vez que eso ocurra, presentaremos la documentación a nuestro consejo para que la revise. Así que todavía no tengo fecha para la reunión del
board“, expresó Kozack, que prefirió no hacer especulaciones al respecto.
También contestó una pregunta específica sobre la meta de acumulación de reservas de la Argentina, que no cumplió con lo acordado en el pacto con el organismo sellado en abril pasado.
“En cuanto a la cuestión más amplia de la acumulación de reservas, lo que puedo añadir es que, como he mencionado, hay un compromiso compartido para el éxito del programa, que ya he señalado, pero puedo añadir que esto, por supuesto, incluye un reconocimiento compartido de la necesidad de seguir construyendo
buffers contra los riesgos externos. Estamos estrechamente comprometidos con las autoridades argentinas", expresó. En la jerga financiera, los
buffers son una suerte de “amortiguadores” en los que implícitamente se incluyen las reservas internacionales.
Según definió el acuerdo firmado con el FMI el 11 de abril pasado, por un monto de 20.000 millones de dólares, el Banco Central (BCRA) debía sumar unos US$4400 millones al 13 de junio.