Las primeras actividades en la muestra rural de Palermo es la exhibición de caballos y esta vez no se traicionó esa costumbre. Ya comenzó la selección de los mejores de cada raza, pero a su vez se hizo un desfile ilustrativo.

La Pista Central fue el punto de encuentro de casi todas las razas que habitualmente pasan por la muestra en una exhibición de belleza, armonía y fuerza.

Como siempre los chicos disfrutaron del movimiento de los equinos a pesar del frío que invitaba más a recorrer los pabellones cerrados. Una vez más quedó demostrador el poder de atracción de esta especie.