El Gobierno uruguayo ordenó hoy el cierre de la frontera con Argentina en la zona de Fray Bentos y vedó la circulación de aviones sobre la planta de celulosa de Botnia, ante las manifestaciones que ambientalistas anunciaron para mañana por la puesta en marcha de la fábrica.

Con esta medida, las autoridades del país vecino iniciaron una serie de acciones para extremar las medidas de seguridad sobre Fray Bentos y la planta de celulosa finlandesa, habilitada repentinamente por el presidente Tabaré Vázquez.

Efectivos de la Prefectura uruguaya cerraron de forma total una de las tres fronteras terrestres que unen ambos países, tras recibir una orden directa de la ministra de Defensa, Azucena Berrutti.

La fuerza de seguridad colocó varios vehículos sobre el puente General San Martín, que une las ciudades de Gualeguaychú con Fray Bentos, para impedir el paso de automóviles y peatones con destino a territorio vecino.

El operativo de seguridad dispuesto por "precaución" sobre la ruta internacional 136 arrancó pasadas las 16:00 y se mantendrá hasta mañana, cuando concluyan las manifestaciones anunciadas por los entrerrianos.

En tanto, la Fuerza Aérea del vecino país prohibió todos los vuelos sobre un radio de tres millas alrededor de la fábrica, de modo que ningún avión militar o civil podrá sobrevolar la zona hasta este sábado.

Según confirmaron fuentes del Gobierno oriental a la agencia Noticias Argentinas, la titular de la cartera de Defensa uruguaya tiene previsto reforzar también el personal de Prefectura de la zona, a fin de controlar las protestas previstas por "tierra, agua
y aire".

Estas determinaciones coincidieron con el primer día de funcionamiento de Botnia, en medio de la tensión que generó la habilitación que le otorgó a Botnia el Ejecutivo de ese país.

"El objetivo es mantener la tranquilidad de nuestros ciudadanos", agregaron fuentes del ministerio del Interior uruguayo en declaraciones a la agencia AFP.

Tras el cierre de la frontera, el ambientalista Alfredo De Ángelis ratificó que las manifestaciones se desarrollarán conforme a lo planeado.

"Uruguay ha puesto las Fuerzas Armadas a disposición del capitalismo salvaje. Tabaré Vázquez no es el Presidente, sino que los son los capitales finlandeses y los inversores transnacionales", afirmó en asambleísta desde el puente internacional, a metros de los prefectos uruguayos.